La solemnidad de Cristo Rey es celebrada por la Iglesia católica y es una de las fechas más importantes del calendario litúrgico, pues se conmemora la autoridad y el reinado espiritual de Jesucristo sobre el mundo.
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Esta festividad, que marca el final del año litúrgico, ha inspirado la creación de imponentes monumentos en su honor en distintas partes no solo de México sino del mundo entero.
¿Alguna vez has visitado alguno de los monumentos que rinden homenaje a esta celebración? A continuación te compartiremos algunos de los más importantes de México, incluido el que se encuentra en Pachuca, Hidalgo.
Cristo Rey en Taxco, Guerrero
Este monumento se encuentra ubicado en el Cerro del Atachi, en el estado de Guerrero; mide aproximadamente cinco metros de altura y está hecho completamente de piedra y se encuentra rodeado de la belleza del Pueblo Mágico de Taxco. Fue construido en el año 2000 pero se inauguró hasta el año 2002 y rápidamente se convirtió en un lugar icónico tanto para los habitantes como para los turistas.
En él puedes encontrar además de la imagen de Cristo rey, un mirador para disfrutar de una vista panorámica de la ciudad y los paisajes montañosos que la rodean. Este lugar combina la fe con el turismo, atrayendo a devotos y amantes de la fotografía.
Cristo Rey de Jardines del Recuerdo en Tlalnepantla, Estado de México
Este particular monumento se encuentra dentro del cementerio Jardines del Recuerdo, y está ubicado en el municipio de Tlalnepantla, en el Estado de México.
Este fue inaugurado en 1994 y alcanza los 33 metros de altura, que de acuerdo con su escultor David Gutiérrez Becerril, representa los años que Jesús estuvo en la tierra; además la obra tiene acabado en cantera rosa, su mirada está dirigida al cielo ya que su diseño está enfocado en brindar un mensaje de esperanza y consuelo a quienes visitan el lugar.
Tiene los brazos abiertos que parece abrazar no solo a los visitantes, sino también al Valle de México, ya que su imponente figura es visible desde distintos puntos de la zona metropolitana.
Cristo Rey del Cubilete, Guanajuato
Este es uno de los monumentos más emblemáticos de México y de los más visitados por personas de todo el mundo durante todo el año; se encuentra situado en el Cerro del Cubilete, en Guanajuato; se le considera el centro geográfico de México.
Este monumento mide aproximadamente 20 metros de altura y está montado sobre una base de otros 10 metros, alcanzando un total de 30 metros. El primer monumento fue construido en 1923, pero fue destruido durante la Guerra Cristera y la actual estructura fue inaugurada en 1950, diseñada por el arquitecto Nicolás Mariscal.
Cada año en el mes de noviembre, miles de peregrinos acuden a este lugar para celebrar la fiesta de Cristo Rey, convirtiéndolo en un punto de gran fervor religioso.
Cristo Rey en Tijuana, Baja California
Este Cristo también es conocido como el "Cristo de los Álamos," se encuentra en el Cerro Colorado y es una de las elevaciones más destacadas de Tijuana.
La imagen mide 25 metros de altura, siendo una de las más altas del norte del país y fue inaugurada en 1997; se diseñó como un símbolo de unidad y protección para los habitantes de esta ciudad fronteriza.
El Cristo Rey de Tijuana es visible desde distintas partes de la ciudad, lo que lo convierte en un referente visual y espiritual para los tijuanenses y los visitantes que cruzan la frontera.
Cristo Rey en Pachuca, Hidalgo
Pachuca también cuenta con su propia versión de Cristo Rey, pues en el cerro de Santa Apolonia, se edificó un monumento con esta imagen que mide 33 metros de altura, también representando los años de vida de Jesús en la Tierra; Fue inaugurado en el año 1996 como parte de una promesa de unos mineros quienes al quedar atrapados dijeron que si salían con vida construirían un monumento en su honor y así fue.
Es una de las estatuas más impresionantes de Hidalgo y se erige como símbolo de paz y fe para los habitantes de la región, cuenta con una capilla en su base que sirve como punto de reunión para los fieles, además que permite una vista espectacular de la ciudad, convirtiéndolo en un atractivo imperdible para locales y visitantes.
