Con la renuncia del entrenador cubano Francisco Pérez Fals, termina una historia de más de 20 años de formación de luchadores olímpicos en el municipio de Tulancingo, con la escuela donde surgieron atletas como la internacional Alejandra Romero Bonilla, Gabriela Canales Herrera, Misael Soto Escorcia, entre otros, y que además, aportaba prácticamente la mitad de atletas hidalguenses que representaron al estado en el país, en distintas competencias, y algunos otros que fueron de selección nacional.
Y es que después de varios años de incertidumbre, Pérez Fals se vio obligado a buscar una estabilidad financiera ante la falta de apoyo por parte del Instituto Hidalguense del Deporte, que solo le daba largas a su solicitud, y presentó su renuncia a principios de este año, para emigrar a los Estados Unidos de Norteamérica para trabajar.
Llegué al estado de Hidalgo el 8 de mayo de 2003, por medio de un convenio que se hizo por la SEP y Cuba Deporte, empresa cubana que en ese entonces mandaba entrenadores a otros países. Fueron 20 años y 5 meses los que estuve en Tulancingo trabajando la lucha olímpica”, recordó el entrenador.
Fue la entonces directora del Instituto Hidalguense del Deporte, Jerusalén Kuri, quien determina que el deporte de la lucha olímpica se iría a Tulancingo, tomando en cuenta la tradición del Santo, y su historia en la lucha libre mexicana; fue así que se mandó a Pérez Fals a entrenar en esta ciudad.
El primer recinto de la escuela de lucha olímpica fue la unidad deportiva Javier Rojo Gómez, sin embargo, el espacio no era de suficiente tamaño para poner un colchón de lucha, por lo que el propio Pérez Fals se dio a la tarea de buscar otro espacio más adecuado, y fue en el Colegio Gabriela Mistral, de la colonia Jardines del Sur, donde inician entrenamientos, primero en un aula, y después en el auditorio de la escuela, donde se colocó un colchón de 10 x 10.
La lucha de Tulancingo radicó todo ese tiempo en la escuela Gabriela Mistral, de manera gratuita, de hecho la directora Susana Cano fue presidenta de la Asociación de Lucha de Hidalgo, hasta el 2014, dijo el entrenador.
Narró que pasaron muchos atletas por esta escuela, entrenando los tres estilos: lucha libre, ambas ramas, y lucha greco-mana. “Hubo varios atletas con resultados importantes, sobre todo a nivel internacional, como Alejandra Romero Bonilla, Misael Soto Escorcia, Adrián Elías Vargas Espinoza, Viridiana Maldonado, Gabriela Renata Canales Herrera y su hermano Josué, quien viene muy bien, con buenas condiciones, entre otros”.
Misael Soto Escorcia, recordó, tuvo en el 2010 un panamericano clasificatorio, y clasificó para los primeros Juegos Olímpicos de la Juventud, que fueron en Singapur en ese año.
Ale Romero ingresó a los 11 años a la escuela de lucha olímpica
Por su parte, Romero Bonilla es la más destacada, ya que ha sido campeona panamericana, campeona centro americana y fue a Rusia a un mundial, además de ser medallista en muchos torneos de carácter internacional.
“Esto es el cúmulo de muchas situaciones que no solo como entrenador se vive en el estado, sino también como atleta… Que yo sepa el profe no recibió un sueldo desde hace años y eso es complicado cuando tienes familia, cuando le dedicas una cierta cantidad de horas al deporte y no hay una retribución para vivir, pues entiendo esa parte y es muy complicado”, dijo al respecto Alejandra Romero.
Opinó que, ante esta situación, no es redituable el competir o dedicarse al deporte, y no es que se haga por dinero, sino que la falta de apoyo, se obliga al atleta o entrenador poner de su bolsa; “es más lo que uno entrega al estado por amor al arte que lo que uno saca. Es complicado seguir priorizando el deporte cuando te ponen barreras para salir adelante”, aseguró.
“Son muchos años y se pierde un lugar que era gratuito, para cualquier persona que quisiera practicar el deporte de la lucha, que me vio crecer a mí, que me vio desarrollarme y es muy triste lo que está pasando en el estado, pero es consecuencia de las decisiones y los manejos que se han llevado, no solo de ahora sino también de otras administraciones”, lamentó Romero Bonilla.
Ale Romero ingresó a los 11 años de edad a esta escuela de lucha olímpica, ya que ella estudiaba en la escuela Gabriela Mistral desde el preescolar, y a los 13 años emigró al Centro Nacional de Desarrollo Deportivo y Alto Rendimiento, para continuar con su preparación
“La lucha era por las tardes, te daban una materia que se llamaba acondicionamiento físico y por las tardes era entrenamiento de lucha”, recordó.
Falta de apoyo obligó a Pérez Fals a dejar el cargo
Francisco Pérez Fals reconoció que fue la falta de apoyo del Inhide lo que lo orilló a dejar el cargo como entrenador en Tulancingo, “cuando entró esta administración tuvimos varias reuniones con la dirección del instituto buscando la posibilidad de una mejoría y un pago, no se logró, estuvimos en eso más de un año con los directivos y económicamente ya no me dio la cuenta y tuve que buscar otra vía para subsistir”, dijo el entrenador.
A la salida del entrenador, eran aproximadamente 26 atletas de Tulancingo y algunos de la región, los que se mantenían entrenado, de los cuales, 14 tenían posibilidades de pelear por un lugar para Juegos Nacionales Conade 2024.
Algunos continuaron con entrenamientos en Pachuca, pero se complicó para ellos; solo Josué Canales Herrera continuó con su preparación.