/ miércoles 27 de septiembre de 2023

Javier Hernández superó los 300 kilómetros en Tor des Glaciers

Aseguró que el próximo año su reto será terminar el recorrido

El tulancinguense Javier Hernández Ruiz fue uno de los 190 participantes del Tor des Glaciers (TOR450); una dura prueba de 450 kilómetros y un desnivel positivo de 32 mil metros en Italia, y aunque corrió poco más de 300 kilómetros, ya que tuvo muchas fallas debido a su equipo GPS, aseguró que ha acumulado la experiencia necesaria para que el siguiente año, sea el primer mexicano en correr en su totalidad este trail.

“No estoy contento con el resultado, pero al final fue una gran experiencia en cuanto a saber de qué manera se corre una justa como esta, en la que no está marcada la ruta. Es una carrera dura no solo por la distancia, el desnivel positivo que tiene y porque te dan 190 horas para terminarla, sino también por el grado de peligrosidad que tiene”, dijo en entrevista.


Señaló que la mayor experiencia que le deja esta participación, es el correcto uso del GPS, lo cual se tiene que hacer constantemente para saber si se sigue o no en ruta. “Llevaba siete horas de colchón, pero fui perdiendo tiempo y lugares porque me perdía constantemente, tuve que correr más y tuve más desgaste por esa situación”.

Relató que llegó hasta el kilómetro 284 de acuerdo con la organización, “pero todavía hice como 20 kilómetros más en lo que continué al siguiente punto, y en algún momento de ese tramo me sentí muy mal y mi mente colapsó, ya no pude pensar con lucidez y decidí abandonar por varias situaciones, entre ellas, el no llevar el equipo adecuado para ir a alta montaña, cuando el clima cambia. El cansancio mental te hace cometer errores”, señaló.

Le faltó también descansar, para poner en orden sus ideas. “Sin embargo, fue una gran experiencia el saber a qué me voy a enfrentar el próximo año. Estuve seis noches y cinco días en ruta, que son aproximadamente 128 horas”.

Dijo que disfrutó y sufrió la competencia. “Es una carrera peligrosa, ya que el riesgo es de muerte en algunas situaciones, donde haces rapel sin línea de seguridad, correr donde piedras se derrumban, senderos entre voladeros, entre otras.

“Es única, extraordinaria, con paisajes maravillosos, competidores extraordinarios y con mucho valor, pero es una carrera mortal, en la que tienes que estar preparado tanto física como mentalmente. Yo iba preparado físicamente, mentalmente también, pero el GPS fue clave porque me hizo cometer muchos errores”, insistió.

El otro mexicano que participó en esta competencia Julio Andrade, tuvo que abandonar en el kilómetro 65 debido a lesión.

DATO

Javier Hernández Ruiz y Julio César Andrade del Estado de México, son los únicos mexicanos actualmente, con derecho a correr esta competencia.


El tulancinguense Javier Hernández Ruiz fue uno de los 190 participantes del Tor des Glaciers (TOR450); una dura prueba de 450 kilómetros y un desnivel positivo de 32 mil metros en Italia, y aunque corrió poco más de 300 kilómetros, ya que tuvo muchas fallas debido a su equipo GPS, aseguró que ha acumulado la experiencia necesaria para que el siguiente año, sea el primer mexicano en correr en su totalidad este trail.

“No estoy contento con el resultado, pero al final fue una gran experiencia en cuanto a saber de qué manera se corre una justa como esta, en la que no está marcada la ruta. Es una carrera dura no solo por la distancia, el desnivel positivo que tiene y porque te dan 190 horas para terminarla, sino también por el grado de peligrosidad que tiene”, dijo en entrevista.


Señaló que la mayor experiencia que le deja esta participación, es el correcto uso del GPS, lo cual se tiene que hacer constantemente para saber si se sigue o no en ruta. “Llevaba siete horas de colchón, pero fui perdiendo tiempo y lugares porque me perdía constantemente, tuve que correr más y tuve más desgaste por esa situación”.

Relató que llegó hasta el kilómetro 284 de acuerdo con la organización, “pero todavía hice como 20 kilómetros más en lo que continué al siguiente punto, y en algún momento de ese tramo me sentí muy mal y mi mente colapsó, ya no pude pensar con lucidez y decidí abandonar por varias situaciones, entre ellas, el no llevar el equipo adecuado para ir a alta montaña, cuando el clima cambia. El cansancio mental te hace cometer errores”, señaló.

Le faltó también descansar, para poner en orden sus ideas. “Sin embargo, fue una gran experiencia el saber a qué me voy a enfrentar el próximo año. Estuve seis noches y cinco días en ruta, que son aproximadamente 128 horas”.

Dijo que disfrutó y sufrió la competencia. “Es una carrera peligrosa, ya que el riesgo es de muerte en algunas situaciones, donde haces rapel sin línea de seguridad, correr donde piedras se derrumban, senderos entre voladeros, entre otras.

“Es única, extraordinaria, con paisajes maravillosos, competidores extraordinarios y con mucho valor, pero es una carrera mortal, en la que tienes que estar preparado tanto física como mentalmente. Yo iba preparado físicamente, mentalmente también, pero el GPS fue clave porque me hizo cometer muchos errores”, insistió.

El otro mexicano que participó en esta competencia Julio Andrade, tuvo que abandonar en el kilómetro 65 debido a lesión.

DATO

Javier Hernández Ruiz y Julio César Andrade del Estado de México, son los únicos mexicanos actualmente, con derecho a correr esta competencia.


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