La directiva del Centro de Formación “Chaco” Giménez de Tulancingo interpuso un reporte arbitral ante la Liga, Cuauhtémoc Blanco, fuera y dentro de la cancha, en el que salió a relucir el tema de racismo.

“Desde que llegamos al “Nido del Águila” en Huachinango, la directiva del equipo contrario nos recibió mal; en la cancha el juego fue brusco y antideportivo que propició que Pedro Yair Marín terminara fisurado de la “espinilla”, declaró Antonio Ávila presidente de los Chacos.

Otra de las situaciones de la más sensible, en ese juego de la cuarta jornada del Torneo de Liga 2019-2020, fue el hecho de que su jugador Blani Zamora fue acosado por la porra de Cefor de Huachinango con gritos racistas: “fueron muchos improperios que hicieron que el futbolista, saliera de la cancha al borde del llanto”.

Todo ello fue permitido por árbitro Gamaliel Dasaed Vite Sánchez, quien además sancionó a Sebastián Alfaro Ortega por lo que fue sancionado de conformidad con lo dispuesto por el Artículo 15 inciso B del Reglamento de Sanciones de la Federación de Mexicana de Fútbol Asociación, A.C. por “desaprobar con palabras o acciones, y recibir una tarjeta Amarilla durante el desarrollo de dicho partido”.

“Los árbitros nos picaron los ojos, el marcador (perdieron cuatro a cero), no lo podemos revertir, esperemos nos den respuesta positiva”, destacó el dirigente deportivo.