Armando Martínez Patiño, presidente del Club Pachuca, dijo que este primer semestre del año será difícil que el Estadio Hidalgo reciba a sus aficionados ante el repunte de contagios que se combina con los climas y otras enfermedades que se pueden confundir con coronavirus.
“Lo más importante es la salud de los aficionados y de la familia del Club Pachuca, qué más quisiéramos que estuvieran acompañándonos, primero porque se hace sentir la localía con la afición en las tribunas, en segunda, porque es motivante para los jugadores y para la directiva, y en tercera por los ingresos que se dejaron de percibir.
“Esto ha hecho que las finanzas se debiliten y tengamos que ser cuidadosos en nuestro presupuesto. Si quisiéramos tener pronto a los aficionados, pero es un hecho que los quisiéramos tener seguros y a salvo. Esperemos que la vacuna sea lo más rápida posible no solo para aficionados sino para todos los mexicanos y luego ver con la Federación Mexicana de Futbol como va esa curva y analizar qué estados y qué estadios podrían abrir primero”.
Por otra parte, reiteró que las exigencias para el Club Pachuca son por su historia “donde siempre ha sido protagonista y peleado campeonatos nacionales e internacionales. Somos muy autocríticos y exigentes en todo lo que hacemos, tenemos la exigencia de los aficionados, nuestra exigencia es calificar a Liguilla y pelear por el campeonato”.
Asimismo, tanto armando Martínez el vicepresidente del Club Martín Peláez y el director deportivo Marco Garcés, reiteraron la importancia de las Fuerzas Básicas, así como de refuerzos que aporten no solo dentro del terreno de juego, sino afuera, como el caso de Matías Catalán, Mauro Quiroga y Harold Mosquera.