/ sábado 22 de agosto de 2020

A cambio de unas monedas bailan en los cruceros

Samuel, Luis, Gonzalo y Arturo esperan ansiosos el cambio del semáforo en uno de los cruceros de la vía federal México-Tuxpan en Tulancingo, mientras Roberto se apresura a poner la música en la grabadora.

Por fin el color rojo se enciende en el regulador de tráfico y se escucha la música breakdance a todo volumen.

Decididos los cinco jóvenes se colocan frente a los automóviles y uno de ellos comienza con ritmo cadencioso a realizar los movimientos de este baile de neoyorkino de la década de los 70´s.

Tienen solo unos minutos para atraer la atención de los conductores, tienen ya el tiempo medido.

Poco antes de que la luz se ponga en verde dos de ellos pasan por entre la fila de coches a pedir algunas monedas que utilizan para sobrellevar la vida de un estudiante que ante la situación económica que ha provocado la falta de empleos por la contingencia sanitaria generada por el Covid-19, buscan sacarle provecho a algo que les gusta y les atrae, el baile.

Ellos son solo uno de los muchos grupos de jóvenes procedentes de entidades circunvecinas que venden objetos, cantan o realizan malabares en las calles de Tulancingo para poder costear sus estudios universitarios o simplemente para ayudar a llevar un poco de comida a sus hogares, de manera digna, sin molestar, lastimar o robar a nadie.

Son parte de la realidad que vive nuestra sociedad en tiempos de la pandemia.



Samuel, Luis, Gonzalo y Arturo esperan ansiosos el cambio del semáforo en uno de los cruceros de la vía federal México-Tuxpan en Tulancingo, mientras Roberto se apresura a poner la música en la grabadora.

Por fin el color rojo se enciende en el regulador de tráfico y se escucha la música breakdance a todo volumen.

Decididos los cinco jóvenes se colocan frente a los automóviles y uno de ellos comienza con ritmo cadencioso a realizar los movimientos de este baile de neoyorkino de la década de los 70´s.

Tienen solo unos minutos para atraer la atención de los conductores, tienen ya el tiempo medido.

Poco antes de que la luz se ponga en verde dos de ellos pasan por entre la fila de coches a pedir algunas monedas que utilizan para sobrellevar la vida de un estudiante que ante la situación económica que ha provocado la falta de empleos por la contingencia sanitaria generada por el Covid-19, buscan sacarle provecho a algo que les gusta y les atrae, el baile.

Ellos son solo uno de los muchos grupos de jóvenes procedentes de entidades circunvecinas que venden objetos, cantan o realizan malabares en las calles de Tulancingo para poder costear sus estudios universitarios o simplemente para ayudar a llevar un poco de comida a sus hogares, de manera digna, sin molestar, lastimar o robar a nadie.

Son parte de la realidad que vive nuestra sociedad en tiempos de la pandemia.



Policiaca

Villa de Tezontepec: Detenidos con presuntas drogas

En cumplimiento de una orden de cateo, se logró la detención de dos personas

Local

Casi 500 muertes cerebrales se registran en Hidalgo

Aunque el padecimiento es mayor en adultos, ya comienza a preocupar el sector juvenil

Local

Pobladores de Tulancingo empiezan a prevenir con sus compras navideñas

Pequeños empresarios del municipio ya ofertan estos productos imprescindibles para la temporada decembrina

Local

Ley de Agua Naciona, Requiere una reforma profunda: Crecenciano Montiel

En la actualidad el agua de desecho no se puede ocupar para fines agrícolas

Local

Yosipa: El Dios emancipado de la cultura Hñahñu que fue reemplazado por Jesús de Nazaret

Según el historiador Juan Carlos Martínez Simón, durante la época de la conquista los españoles impusieron a sus dioses, según la tradición original

frontpage

Familias diversas son cada vez más aceptadas en la sociedad: Psicóloga Xanah Rosales

Se debe empoderar para que sepan que son bien recibidas, sobre todo en el núcleo familiar, aseguró la psicóloga Xanah Rosales