Se queda un pendiente en materia cultural y artística (en lo que compete al gobierno municipal) para la siguiente administración, consideran los titulares de la Secretaría de Cultura del gobierno tulancinguense, aunque reconocieron que en este periodo (2020-2024) se logró un importante crecimiento en materia de accesibilidad en este rubro.
Eréndira Balderas Castro, Secretaria de Cultura, Educación y Deporte; así como Humberto Delgadillo, director de Cultura en el gobierno de Tulancingo, explicaron que tal crecimiento no solo se aprecia en la percepción y opiniones que desbocan ciudadanos cuando visitan alguno de los recintos a cargo de la dependencia, sino que es palpable en números:
Tan solo en el último año, detallaron los funcionarios, las bibliotecas municipales que son ocho (siete en localidades y una regional, la Sor Juana Inés de la Cruz) registraron una afluencia histórica, con 42 mil usuarios tan solo en los últimos 12 meses, con promedio de 45 mil visitantes por cada año de la administración, sin contar 2020 y 2021, cuando hubo restricciones por la pandemia de COVID-19.
Una cifra parecida se replica en el área de Museos, con 56 mil usuarios en el último año; y 60 mil usuarios en el Centro Cultural Ricardo Garibay, núcleo artístico del primer cuadro de Tulancingo y donde por cierto, también se rompieron récords en cuanto a número de galerías presentadas. Además, es un espacio que creció en tamaño, según explica el director.
“Tenemos muchos jóvenes muy talentosos aquí en Tulancingo y en los alrededores, por lo que abrimos dos galerías más: la Ricardo Garibay y la Dolores Soto Madariaga, luego una sala. Ahorita tenemos tres salas y dos galerías, todo está situación de apertura para toda la sociedad es apoyar a los jóvenes, abrirles esa puerta. Antes solo había una galería y esperar para exponer tus cuadros era una limitante (...) hemos tenido galerías con grandes artistas reconocidos a nivel nacional y a internacional”, externó Delgadillo.
El crecimiento en cifras se tradujo en consecuencias positivas para el gremio artístico, pues de acuerdo con el servidor público, “hemos logrado que haya colectividad”, con galerías en las que han exhibido obras de hasta 12 artistas al mismo tiempo. Además, se abrió espacio a múltiples referentes locales, con exhibiciones que pasaron de en promedio seis al año en gobiernos pasados, a 34 en el último año de la actual gestión, un total de 63 muestras del 2021 a la fecha.
“Tulancingo se ha mencionado como cabecera cultural, la demanda es muy grande, la gente lo exige y también los mismos artistas”, abundó.
La Escuela de Artes, El Pendiente
En el pasado, la entonces llamada “Casa de la Cultura” impartía talleres en múltiples disciplinas artísticas. En la actualidad, esta misión cambió de sede y ahora es en la Escuela de Artes José María Lezama donde se pretende no solo instruir en música, canto, piano, violín, guitarra, batería, teatro, dibujo y pintura, sino que el proyecto se planteó para también enseñar oficios.
“Se queda de tarea darle continuidad a la Escuela de Artes. Si bien ahorita como tal no es escuela pues son talleres, pero hay que darle continuidad y que se logre la Escuela de Artes y Oficios, para la ciudadanía es muy importante tenerla”, expresó Eréndira Balderas.
Para completar la concepción original del proyecto, la nueva administración deberá emprender las diligencias administrativas para registrar la escuela formalmente ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) y obtener la clave de funcionamiento. Un segundo paso es incorporarla al sistema educativo del Instituto Nacional de Bellas Artes, detallar los programas académicos, reclutar a catedráticos certificados en artes, entre otras.
“Hay muchos talentos en Tulancingo y en la región, queremos que esto crezca”, concluyó Balderas.