Tras estudiar 212 muestras en el municipio indígena de Acaxochitlán, Miriam Berenice González Ibarra reconocida como la Mejor Profesional de la Salud Latinoamericana en Investigación y Genética, reveló que el 60 por ciento de la población mapeada padece diabetes.
Como parte de un proyecto de maestría, mencionó que en el 2008 comenzó a estudiar variantes indígenas, a través de ello, identificaron que las poblaciones indígenas son más susceptibles a enfermedades inclusive que las poblaciones mestizas.
“Veía mucho que las poblaciones indígenas tenían muchas complicaciones para diabetes, hipertensión, insuficiencia renal, e iniciamos un proyecto de educación en diabetes, para ver el por qué se estaban complicando las poblaciones”.
A través de ello, señaló que se dieron cuenta que había un componente extra en este caso el componente genético, -en ese tiempo- dijo que había muy poca información acerca de la genética poblacional.
“Sabíamos que había genes susceptibles a ciertas enfermedades, especialmente hablando de colesterol, triglicéridos, algunos de diabetes y empezamos justamente a ver estas variaciones en las poblaciones”, expuso.
En Hidalgo, reveló que en el municipio de Acaxochitlán se tomaron 212 muestras, después, dijo que entró a un Consorcio de Etnias Indígenas a nivel nacional, por lo que se estudiaron en diferentes estados: nahuas, otomíes-tepehuas, teenek, mayas, tsotsiles, chontales, tarahumaras y huicholes.
“Vimos que había muchísima diferencia desde el punto de vista genético, comparamos estas poblaciones con otras poblaciones del mundo indígenas y observamos que había variaciones y que nuestras poblaciones eran únicas y encontramos genes de predisposición a diabetes”, reveló.
“Al día de hoy podemos determinar que hay ciertos genes de predisposición, pero también hay estudios de farmacogenómica, vimos que había ciertos genes que nos decían que estas poblaciones no tenían las vías para metabolizar ciertos medicamentos y esto afecta mucho al tratamiento de los pacientes”, compartió.
Precisó que de las 212 muestras realizadas en Hidalgo, todas tenían un grado de intolerancia a la glucosa o diabetes, “eran solo 49 personas que teníamos sanos, sin colesterol ni triglicéridos, no diabetes y el resto, tenía problemas en la glucosa, en colesterol y en la presión inclusive.