El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reinició este domingo la construcción de la planta coquizadora, en las instalaciones de la refinería Miguel Hidalgo, de Tula, con una inversión de sesenta mil millones de pesos del presupuesto federal, después de cinco años.
Así lo dio a conocer, este domingo, el mandatario nacional, a través de sus redes sociales y agregó que lo anterior permitirá ya no producir combustóleo sino gasolina, y esto significa eficientar el proceso de producción de combustibles.
“Esta planta se paró en el sexenio anterior y la cual estaba inconclusa en lo administrativo, además que se le debía a las empresas y teníamos dos caminos, dejarla así inconclusa o terminarla y mejor se hará una inversión suficiente para concluirla”, señaló el presidente de México.
Mencionó que hace tiempo se trajeron tanques muy grandes por carreteras y no era recomendable dejar este equipo se convirtiera en chatarra, por lo que personal federal hizo trabajo para resolver problemas administrativos y pagar deudas y ahora esta obra permitirá próximamente producir más gasolinas
Andrés Manuel López precisó que serán sesenta mil millones de pesos de puro presupuesto federal que se invertirán en la construcción de esta planta petrolera, y reactivara la economía para región de Tula y generará ocho mil fuentes de trabajo y bienestar para la gente.
“Vamos a terminar esta obra para finales del próximo año 2023 y con la planta coquizadora se tendrán los combustibles que demandan los mexicanos y ya no vamos comprar energéticos al extranjero, además que se producirán treinta mil barriles adicionales de gasolinas”, indicó.
Acompañado de funcionarios federales y el gerente de la refinería Miguel Hidalgo de Tula, Felipe Careaga Campos, el ejecutivo nacional hizo un recorrido por las instalaciones de la referida planta y otras más del complejo petrolero que se localiza sobre la carretera federal Jorobas-Tula, a la altura de este municipio hidalguense.