Habitantes de Acatlán así como el Monseñor Domingo Díaz Martínez, arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo, pidieron a Dios por la llegada de lluvias al municipio, toda vez que según consideró el clérigo, “ya nos urge”.

Fue durante la bendición anual de la laguna de Zupitlán, ceremonia católica donde se izan además varias cruces en honor al día de la Santa Cruz, que el arzobispo exhortó a los más de 300 asistentes para que “pidamos a Dios para que llueva, no es lo mismo si lo piden 100 personas a que lo pidan 5 mil, pidamos a Dios porque ya nos urge”

Entre cohetones y cantos religiosos, una procesión se desplegó previamente por los campos de cultivo aledaños a Zupitlán, todos ellos a la vista secos por la sequía que desde hace casi dos años azota a la demarcación. Aproximadamente 80 personas cargaban tres grandes cruces de madera, las cuales se colocan en tres puntos diferentes de la laguna, en ofrenda y agradecimiento por la permanencia de este cuerpo de agua.

Cabe mencionar que este festejo es asimismo parte de la festividad del Día de la Cruz, aunque por motivos de agenda se recorrió hasta este nueve de mayo. Por ende, en su mensaje de homilía, además de urgir por las lluvias, Monseñor recordó que la cruz sin la imagen de Cristo representa que el Hijo de Dios ha resucitado.

“La Cruz nos da a entender el éxito y el triunfo, nos recuerda que hagamos la tarea, así como Jesús, que hizo su tarea”, expresó Monseñor.

Sobre la falta de lluvia, según el último Monitor de Sequía que emite la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Acatlán se mantiene en sequía extrema, tal cual ocurre en los otros cuatro municipios que conforman la región del Valle de Tulancingo. En igualdad de condiciones está la demarcación vecina de Agua Blanca.