TULA DE ALLENDE, HGO.-A casi un año del cierre de la Zona Arqueológica de Tula, las afectaciones económicas son cuantiosas para artesanos de la Plaza de las Artesanías de esta ciudad.

Tan solo de aproximadamente treinta locales que hay en dicha plaza comercial ubicada en la céntrica calle Zaragoza, solo están abiertos algunos durante la mayor parte del día y hay pocas ventas en el lugar.

Así lo señalaron, ayer, artesanos que tienen su mercancía artesanal sin poder venderse, pues a su decir, el principal atractivo turístico de Tula son los Atlantes y está cerrada la Zona Arqueológica desde hace varios meses, por la situación sanitaria que prevalece actualmente.

Los artesanos, quienes pidieron omitir sus nombres, explicaron que no es congruente que los parques acuáticos y balnearios de esta región ya reabrieron sus puertas y la Zona Arqueológica continuaba cerrada hasta ayer. “Los turistas nacionales y extranjeros llegan a los balnearios, pero ya no pasan a la ciudad de Tula porque el recinto prehispánico mencionado que alberga vestigios de la cultura tolteca está cerrado” indicaron los informantes.

Desde el pasado 20 de marzo del año 2020 previo al equinoccio de la primavera, la Zona Arqueológica de esta ciudad fue cerrada por la pandemia del Covid-19, y esto ha provocado afectaciones económicas a más de ciento cincuenta familias que dependen directamente del comercio al interior del mencionado recinto prehispánico.

Así como de otras dos mil familias que dependen indirectamente de la llegada de turistas nacionales y extranjeros, cuentos como las que laboran en restaurantes, hoteles y cafeterías, vendedores de artesanías, guías turísticas, entre otros.