“Es un resultado que esperábamos; la mayoría de la gente que está en el Congreso es buena, invertimos nueve meses de estar trabajando, pero nosotros llevamos nueve años promoviendo el sí a la vida”, dijo monseñor Domingo Díaz Martínez.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo siempre manifestó su postura de que la vida es un derecho inalienable y que nadie lo debe quitar.
Respecto a la decisión de los congresistas locales de desechar el dictamen que aprobaba la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) en las 12 primeras semanas de gestación, agregó: “Gracias a Dios, dio fruto ese trabajo que vamos a continuar; convenceremos a la gente que se ponga a favor de la vida”.
La votación de los legisladores hidalguenses fue de 15 sufragios en contra, 10 a favor y cinco abstenciones.
De igual modo se desechó la petición de regresarla a comisiones, con una votación de 16 en contra, 13 a favor y una abstención.