Aumenta consumo de medicina alternativa en Pachuca 

En Pachuca ha aumentado el consumo de medicina alternativa, así lo refirió, Lourdes Benítez, encargada de una tienda naturista, ubicada en la ciudad; los productos que más se venden son los que sirven para tratar diabetes, hipertensión y deficiencias renales; refirió que los clientes recurren a este tipo de productos para alternarlos con medicina alópata.

Productos herbolarios, pastillas, geles, infusiones y suplementos alimenticios son algunos de los tantos artículos que han disparado sus ventas en la capital hidalguense, “La gente viene regularmente a preguntar acerca de productos para tratar diversas enfermedades, nos tienen confianza porque son artículos de origen natural, de acuerdo a los inventarios que hacemos con regularidad, hemos notado que se venden más los que sirven para controlar o mejorar la calidad de vida de las personas con enfermedades crónicas”, contó Benítez.

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Cápsulas a base de ajo y omegas, prometen óptimos resultados para controlar alergias, diabetes, afecciones respiratorias, de la vista, cansancio, boca amarga, hipertensión y problemas de riñón; moringa, uña de gato, noni y cartílago de tiburón son otros de los artículos que la población consume con regularidad para tratar deficiencias cancerígenas, hepáticas, de glucosa y artritis, entre otras.

De acuerdo a la información otorgada, el incremento de estos productos, inició posterior a los meses de pandemia y se ha mantenido durante este año, “Durante la contingencia tuvimos incluso entregas a domicilio, la gente alternaba nuestros productos con su medicina normal, incluso algunas pastillas para dormir y té anti estrés también se nos agotaron…ahora las ventas digamos que se han mantenido, aumentaron un 20 por ciento”, explicó.

Además, otro de los productos bastante solicitados por la población son todos aquellos que prometen reducción de peso; al respecto, la entrevistada contó que para la obesidad mórbida ofrecen geles, pastillas, fibras, malteadas e infusiones: “La demanda de éstos, aumenta entre noviembre y enero, porque es cuando la gente quiere seguir disfrutando de la comida de la época sin subir de peso o algunos quieren reducir tallas antes o después de Navidad”, finalizó.