Pese al incremento de perros en condición de calle debido a la temporada de celo, vecinos de diferentes colonias reinciden en el impedimento para el aseguramiento de ejemplares, aseguró la Dirección de Sanidad tulancinguense, dependencia que incluso señaló que sus elementos han sido objeto de agresiones por parte de pobladores mientras realizan su labor.
Erika Miralrio Medina, Directora de Sanidad, indicó que “cada vez son más las colonias en donde se enfrenta el escenario de opiniones divididas en lo que respecta a operativos de captura a animales en situación de calle, principalmente caninos”
Según la funcionaria, en la actual temporada de celo, los reportes por presencia de jaurías se incrementaron hasta en un 50 por ciento, lo que se traduce en al menos 50 incidencias por semana. Sin embargo, señaló algunas colonias en esta ciudad que no aplican el reglamento de animales de compañía, pues detectaron que dueños dejan libres a sus mascotas.
“Los Sabinos, Rincones de la Hacienda tercera sección, Rojo Gómez, Napateco, colonia Guadalupe y El Paraíso, son puntos recurrentes en donde un grupo de vecinos pide la intervención municipal y en contraposición otros vecinos obstaculizan las labores de control canino con el aseguramiento de ejemplares”, señaló la dependencia.
Es en los operativos de captura donde personal de Sanidad ha sido agredido por los vecinos, eventos en los que incluso fue necesaria la intervención de Seguridad Pública. Por tal motivo, adelantaron que “Sanidad Municipal aplicará firmeza y procederá conforme el reglamento”.
“Un nuevo exhorto a los propietarios de mascotas a tenerlas en resguardo, ya que de lo contrario, se aplicará el aseguramiento del animal y otras sanciones que están señaladas por normativa”.
Según enuncia el Reglamento para protección, posesión, y control de animales de compañía en Tulancingo, todos los propietarios, poseedores o encargados de animales de compañía que tengan la necesidad de usar la vía pública, parques, senderos o espacios de uso común, tendrán que llevar a su mascota con placa de identificación, collar, pechera y correa.
“De ser necesario deberán portar bozal, así como todos los aditamentos de seguridad cuando se trate de animales que por su tamaño, temperamento y adiestramiento puedan representar un riesgo para las personas”, añade el reglamento.
Asimismo, se establece que los propietarios, poseedores o encargados de animales que causen daño a las personas u otros animales o daños en propiedad ajena o intimiden a la población, serán responsables de los daños ocasionados y acreedores a la sanción administrativa correspondiente, independientemente de la responsabilidad civil o penal en la que hubieran incurrido.
La omisión en el cumplimiento de lo dispuesto en este artículo será sancionado con el decomiso del animal y con una multa de 5 a 50 UMAS, medición que va desde los 543 hasta los 5 mil 428 pesos. En caso de aseguramiento de una mascota en operativo de captura, el término para su recuperación es de 72 horas, como lo marca el reglamento.