La empresa que construye el Puente Colgante sobre el río Tula que une a la calle Quetzalcóatl y la colonia 16 de Enero, realiza pruebas de resistencia a la estructura previo a ponerlo en funcionamiento.
El puente fue derribado por la corriente de agua, durante la inundación registrada el 6 de septiembre del 2021. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) costea su construcción.
La obra inició el pasado 15 de marzo, y según informó el organismo, se tenía previsto concluir en ocho semanas, el 15 de mayo pasado, pero no se cumplió con la entrega. Y aunque en apariencia el puente ya está terminado, aún no ha sido abierto.
Al respecto, ayer los trabajadores informaron que aún falta construir un pequeño piso de concreto en la base del lado de la colonia 16 de Enero y se realizan pruebas de resistencia, porque es una estructura muy utilizada e incluso transitan bicicletas y motocicletas.
"Por lo que pudiera requerirse de al menos una semana abrirlo" refirieron.
El puente colgante tiene una extensión de 30 metros de largo por 2.5 de ancho. Fue construido con tirantes de acero y el piso con tablones de madera, en tanto que las protecciones laterales se tejieron con lazo de fibras naturales.
Respecto a la inauguración de la obra funcionarios municipales señalaron que Conagua aún no les informa de la fecha de su apertura y solo les indicaron que se realizan pruebas de resistencia.