Para comuneros de la localidad de Los Avioncitos en Acaxochitlán, comunidad aledaña a la laguna de El Tejocotal, autoridades ignoran el recurrente llamado para atender el problema de tala clandestina que desde hace años padece el municipio serrano, pues según reportó la Unión de Comerciantes de este sitio, “ni la empresa Fénix ni el municipio están atendiendo esta situación”.
Solicitamos intervención del municipio para no perder los espacios de nuestro actual Pueblo Mágico Acaxochitlán, estamos siendo atacados por la tala clandestina en nuestra área de Los Avioncitos Tejocotal , tan solo el mes pasado nos talaron más de 10 árboles, iniciando este mes con un robo de ocho árboles. Ojalá que las instancias nos apoyen a encontrar una solución y pedimos a todos los ciudadanos que volteen a ver para recuperar y preservar estos espacios”, expresaron los quejosos.
Argumentaron que aunque están en constante comunicación con elementos de Seguridad Pública de Acaxochitlán, “sus acciones son deficientes, argumentando que tienen pocas unidades y elementos”. Según detectaron, la mayoría de robos se ejecutan en la madrugada o incluso de día, cuando cae la lluvia, de tal forma que el ruido que hace la motosierra se pierde entre el sonido de la precipitación.
“Vamos a volver a realizar rondines porque definitivamente notamos que el municipio y la empresa generadora Fénix no tomarán medidas. Solicitamos la intervención de la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) para presionar a que le tomen la importancia que se merece el derribo de árboles (...) se han presentado los de Seguridad Municipal solo a realizar los reportes, pero no pasa de ahí”, reclamaron.
Apenas en junio pasado, el colectivo Ocotenco Kuautlali manifestó nuevamente su preocupación por la tala clandestina en el Pueblo Mágico, al considerar que de acuerdo con sus mediciones, en el bosque de Acaxochitlán ya no se ven ni ocotes ni encinos debido a que los aserraderos agotaron por completo a estas especies. Pese a tal problema, denuncian que autoridades federales siguen dando permisos a este tipo de negocios para operar en la región.
Dicho colectivo, cuya misión es proteger las regiones boscosas de la localidad de Zacacuautla en el Pueblo Mágico, denunció que las autoridades autorizaron seis aserraderos, además, observaron que es recurrente la circulación de vehículos de carga con troncos extraídos de forma lícita o ilícita.
“Llevamos años luchando contra la tala clandestina, en concreto mi organización Ocotenco Kuautlali de 2007 a la fecha ha denunciado la tala clandestina que no para y las autoridades no han intervenido. Entonces, ¿qué pasa?, ¿nos preocupamos por el cambio climático o solo son documentos, papeles?”, cuestionó ante medios la activista Filiberta Nevado.
Algunas consecuencias de la tala inmoderada que han detectado ellos, son la desaparición de especies como encino y ocote, así como dos manantiales que se secaron.