El bullying es una agresión de una persona hacia otra, intencionada, reiterada; se da por días, semanas, meses o hasta años, en las víctimas puede ocasionar depresión, ansiedad, aislamiento e incluso orilla al suicidio. En el Código Penal del Estado de Hidalgo el bullying se considera un delito en el rubro de la violencia familiar y puede ser sancionado con base a los lineamientos que determine un juez.
De acuerdo con la psicóloga Yesenia Cruz García, quien brinda servicio para la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), el bullying es una situación compleja a los ojos de los demás porque muchas veces no se pone la atención que se requiere y principalmente no es muy visible hacia las autoridades escolares o hacia los padres.
Una de las generalidades del bullying es que los agresores lo hacen de una forma consciente, con la intención de dañar a otros, algunos incluso lo hacen para elevar su autoestima, para sentirse bien, viendo como otros se sienten mal, comentó.
Con base a las estadísticas, este problema se da principalmente de los 6 a los 15 años de edad, en el ambiente escolar y la etapa más dura es en la secundaria.
Las víctimas pueden presentar episodios depresivos que deben ser evaluados por un profesional de la salud mental, otros problemas que se desarrollan son la ansiedad, ataques de pánico, aislamiento, estrés, disminución de capacidad cognitiva y en un caso extremo llevan al suicidio o a tratamientos psiquiátricos.
“El bullying se detecta en casa principalmente, una de las primeras señales es que ya no quieren ir a la escuela, se hacen enfermos o ponen mil pretextos, también se refleja en un bajo rendimiento escolar, el aislamiento, episodios de tristeza, irritabilidad y cambios bruscos de personalidad”, agregó Yesenia Cruz.
De acuerdo con la psicóloga, la prevención viene desde casa, donde los padres deben inculcar valores como el respeto y poner límites para no dañar la integridad de los demás. El bullying es algo tratable y es muy importante que sea con un especialista de la salud mental.
La sanción en caso de que se turne un caso al Ministerio Público, será juzgada como violencia familiar y de acuerdo a lo que se determine, podría haber prisión de uno a seis años así como una multa económica. En caso de ser menores de edad, las penas son más reducidas, de acuerdo con el Código Penal en la entidad.
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