SAN AGUSTÍN TLAXIACA, Hgo.- Personal de la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim), clausuró una toma clandestina y una derivación, no legal a una de las redes de abastecimiento que suministran el servicio a conocida estación de gasolina, la cual, se informó, además contaba con servicio de lavado de autos.
De acuerdo a información emitida por el organismo que encabeza Juan Evel Chávez Trovamala, el hallazgo se realizó gracias a un reporte ciudadano de carácter anónimo, en el que, los residentes aledaños a la estación de hidrocarburo, presuntamente, se percataron que el establecimiento no contaba con medidor.
A través de la notificación telefónica los denunciantes además informaron que, presuntamente, la gasolinera contaba con un negocio alterno dedicado al lavado de autos, principalmente vehículos de gran tamaño.
En este sentido, Raúl Márquez, adscrito al área comercial de la Caasim, informó que tan pronto se recibió la notificación se acudió al comercio donde luego de realizar el rastreo correspondiente se confirmó la información emitida a través de la denuncia anónima.
De inmediato, dijo, se comenzaron los trabajos para suspender la toma de la red general, área en la que también se detectó una derivación para la extracción del vital líquido no legal.
Posteriormente, indicó, se solicitó apoyó al departamento jurídico para iniciar con los procedimientos legales ha lugar.
Al respecto, el sistema operador del agua informó que desde que comenzó la administración de Juan Evel Chávez, hace cinco meses, se han detectado a la fecha más de dos mil tomas clandestinas, de las cuales, se informó, alrededor del sesenta por ciento corresponden a servicios de tipo comercial e industrial.
Durante el encuentro “Esencia del Empresario Exitoso”, realizada en la capital el titular de la Caasim, además reveló que en la Fiscalía ya se encuentran diversos procedimientos legales que tienen que ver con el robo de cable, agua, tomas clandestinas para el surtimiento de pipas y más recientemente del robo de medidoras, las cuales, se presume, son ubicados en sitios con tomas clandestinas “para hacerlas pasar como tomas legales”.