TULA DE ALLENDE, Hgo.- A partir de este fin de semana comenzó la venta de flor de cempasúchil en los campos de cultivo del municipio, donde son más de tres kilómetros de largo de sembradíos sobre la carretera que conecta a los municipios de Tula de Allende y Tepetitlán.
En la orilla de la carpeta asfáltica se colocan numerosos puestos al pie de las milpas, donde pobladores acuden a comprar la flor para adornar sus altares, o bien para comercializar el producto.
“Los primeros en llegar son los revendedores, compran surcos completos para ir a revender a los mercados del Estado de México, Puebla y Querétaro”, señaló al respecto José Jiménez Hernández, campesino de la comunidad Santa Ana Ahuehuepan, en Tula. Mientras que Mariana Alvarado Alonso, habitante de la localidad Benito Juárez, mencionó textualmente: “Desde hace treinta años sembramos la flor, no se le gana mucho, pero sale para comer, gracias a Dios”.
La mujer recorre las parcelas, desde temprana hora del día, limpiado de hierbas los cultivos. “Nos ponemos en la curva, ahí la gente ya nos conoce y siempre nos busca. Vendemos brazadas de flores a 50 pesos y hasta de veinte”, indicó.
En las parcelas se puede encontrar la tradicional flor de cempasúchil, la pata de león, nube, crisalia, crisantemos y en menor media gladiolas; los manojos en promedio están en cincuenta pesos.
A decir de los entrevistados, estarán hasta el dos de noviembre vendiendo las flores en las parcelas y las 24 horas instalarán los puestos, adonde acuden a comprar revendedores, hasta pobladores de los municipios cercanos.
“Después de muchos meses de arduo trabajo en el campo, vamos a vender nuestras flores de temporada a la gente que pase por aquí, lo cual nos permitirá mantener a nuestras familias y así llevar el pan de cada día a las mesas de nuestros hogares”, señalaron.