/ sábado 14 de octubre de 2023

¿Cómo se celebra el Día de Muertos en Hidalgo?: Xantolo, Santoru, Llorada del Muerto, costumbres y tradiciones más arraigadas

Cada región del estado posee sus propias costumbres y formas de celebrar, en donde colocan ofrendas en los altares, para que los difuntos coman, beban y aspiren el sabor de sus platillos favoritos

Desde la visión indígena se tiene la creencia que las almas de los difuntos regresan del mundo de los muertos para convivir con sus deudos y para ofrecerle en el altar de los muertos, la ofrenda para que coman, beban y aspiren el sabor de sus platillos favoritos y para recordarlos, no como una pérdida o ausencia, sino como seres que permanecen en la memoria y el recuerdo.

Cómo se celebra el Día de Muertos en Hidalgo

El Día de Muertos, es una celebración que se vive y se respira en Hidalgo, para reencontrarse con aquellos que en vida fueron parte de una familia para expresarle, que se les quiere y se les extraña, como si aún estuvieran vivos.

Esta tradición es muy significativa en el estado, pero en cada región se celebra de distintas maneras, de acuerdo a su cosmovisión e ideología.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

Xantolo, ceremonia a los muertos que se realiza en la huasteca hidalguense

La festividad dedicada al Día de Muertos, en la huasteca hidalguense se le llamada "Xantolo", que se adoptó del latín Sanctorun, que significa "todos santos", y responde en el pensamiento indígena, a una forma de veneración a los difuntos que regresan a la tierra para visitar a sus antiguos parientes.

El día de San Miguel Arcángel, 29 de septiembre comienza la fiesta grande del “día de muertos” cuando los dioses del inframundo Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl abren las puertas del Mictlán y las almas comienzan a llegar al Yoliztli (mundo de los vivos).

Se instala el altar y se realiza la primera ofrenda a la madre tierra y se le pide por las buenas cosechas y continuará el 1 y 2 de noviembre, para que el día de San Andrés, el 30 de noviembre, se cierra las puertas del Mictlán para que las almas regresan al inframundo y así finaliza esta tradición con la última ofrenda.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

Sant´oru, ritual y ofrenda para los muertos en Huehuetla

Para los ma'alh'ama' (tepehuas) a estos momentos memorables se le llama “Sant'oru”, donde se genera una simbiosis cultural, de tradiciones, costumbres y gastronomía.

Los tepehuas tienen una profunda veneración por sus ancestros y practican rituales relacionados con el culto a sus muertos, de acuerdo con Palemon Alberto Flores Aparicio, embajador de la Cultura Tepehua.

Las tumbas son adornadas con ofrendas que reflejan su creencia en la vida después de la muerte y su conexión continua con sus ancestros. El Sant'oru marca el fin del ciclo agrícola o fin de cosecha del maíz.

Los ma'alh'aman alimentan a sus difuntos a su regreso una vez al año, porque cumplen una función social de ayuda para el desarrollo productivo y el bienestar de la comunidad, dicen: “que solo a través de la muerte se llega a Dios “Kin Pai' an”.

En esta celebración la gente construye su altar, cuando la familia en el interior de su casa toma parte en su elaboración y preparativos, quienes haciendo gala de mucha creatividad, se convierten en artistas populares guiados por la devoción a esta celebración y así contribuyen a fomentar la difusión de esta ancestral tradición.

En Tutotepec, recuerdan antigua Llorada del Muerto en el panteón

Con música de violín, guitarra y viento, comida y bebida, pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso.

La localidad de Tutotepec, encierra un gran misterio, su gente es muy devota y hasta hace algún tiempo, los restos de sus difuntos eran exhumados para limpiarlos, pero esta práctica solemne se dejó de hacer desde hace 10 años y actualmente se traduce en sana convivencia familiar en las tumbas del cementerio de Tuto.

El 2 de noviembre en Tutotepec, es el gran día para todas las personas que allá viven, porque acuden las familias al cementerio para adornar sus tumbas con flores de cempasúchil, para convivir con sus difuntos.

Los habitantes colocan los platillos sobre la tumba como si fuera una mesa, las familias se postran alrededor y algunos contratan tríos huastecos y banda de viento, donde se entonan sones propios de la región.

La comida que llevan para compartir con sus familiares es la que retiraron de sus ofrendas, sus tumbas las adornan con flor de cempasúchil. Al camposanto acuden prácticamente todas las familias de los difuntos sepultados para colocarle flores y convivir con ellos durante todo el día.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

En Acatlán, realizan Feria de Muertos

Habitantes de las comunidades aledañas a Acatlán, tales como Almoloya, Alcholoya, Metepec, entre otras, acuden cada año al panteón de dicha localidad, espacio donde también se instala la tradicional Feria de Muertos y que congregan al menos a tres mil personas en el único día de celebración.

Contrario a lo que sucede en otros sitios, en Acatlán el festejo más grande es el día dos, por tal motivo es que desde el 27 de octubre comienzan a repartirse los lugares para interesados en poner puestos con flores, elotes, comida, dulces, pan o bebidas alcohólicas en la feria.

Desde la visión indígena se tiene la creencia que las almas de los difuntos regresan del mundo de los muertos para convivir con sus deudos y para ofrecerle en el altar de los muertos, la ofrenda para que coman, beban y aspiren el sabor de sus platillos favoritos y para recordarlos, no como una pérdida o ausencia, sino como seres que permanecen en la memoria y el recuerdo.

Cómo se celebra el Día de Muertos en Hidalgo

El Día de Muertos, es una celebración que se vive y se respira en Hidalgo, para reencontrarse con aquellos que en vida fueron parte de una familia para expresarle, que se les quiere y se les extraña, como si aún estuvieran vivos.

Esta tradición es muy significativa en el estado, pero en cada región se celebra de distintas maneras, de acuerdo a su cosmovisión e ideología.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

Xantolo, ceremonia a los muertos que se realiza en la huasteca hidalguense

La festividad dedicada al Día de Muertos, en la huasteca hidalguense se le llamada "Xantolo", que se adoptó del latín Sanctorun, que significa "todos santos", y responde en el pensamiento indígena, a una forma de veneración a los difuntos que regresan a la tierra para visitar a sus antiguos parientes.

El día de San Miguel Arcángel, 29 de septiembre comienza la fiesta grande del “día de muertos” cuando los dioses del inframundo Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl abren las puertas del Mictlán y las almas comienzan a llegar al Yoliztli (mundo de los vivos).

Se instala el altar y se realiza la primera ofrenda a la madre tierra y se le pide por las buenas cosechas y continuará el 1 y 2 de noviembre, para que el día de San Andrés, el 30 de noviembre, se cierra las puertas del Mictlán para que las almas regresan al inframundo y así finaliza esta tradición con la última ofrenda.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

Sant´oru, ritual y ofrenda para los muertos en Huehuetla

Para los ma'alh'ama' (tepehuas) a estos momentos memorables se le llama “Sant'oru”, donde se genera una simbiosis cultural, de tradiciones, costumbres y gastronomía.

Los tepehuas tienen una profunda veneración por sus ancestros y practican rituales relacionados con el culto a sus muertos, de acuerdo con Palemon Alberto Flores Aparicio, embajador de la Cultura Tepehua.

Las tumbas son adornadas con ofrendas que reflejan su creencia en la vida después de la muerte y su conexión continua con sus ancestros. El Sant'oru marca el fin del ciclo agrícola o fin de cosecha del maíz.

Los ma'alh'aman alimentan a sus difuntos a su regreso una vez al año, porque cumplen una función social de ayuda para el desarrollo productivo y el bienestar de la comunidad, dicen: “que solo a través de la muerte se llega a Dios “Kin Pai' an”.

En esta celebración la gente construye su altar, cuando la familia en el interior de su casa toma parte en su elaboración y preparativos, quienes haciendo gala de mucha creatividad, se convierten en artistas populares guiados por la devoción a esta celebración y así contribuyen a fomentar la difusión de esta ancestral tradición.

En Tutotepec, recuerdan antigua Llorada del Muerto en el panteón

Con música de violín, guitarra y viento, comida y bebida, pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso.

La localidad de Tutotepec, encierra un gran misterio, su gente es muy devota y hasta hace algún tiempo, los restos de sus difuntos eran exhumados para limpiarlos, pero esta práctica solemne se dejó de hacer desde hace 10 años y actualmente se traduce en sana convivencia familiar en las tumbas del cementerio de Tuto.

El 2 de noviembre en Tutotepec, es el gran día para todas las personas que allá viven, porque acuden las familias al cementerio para adornar sus tumbas con flores de cempasúchil, para convivir con sus difuntos.

Los habitantes colocan los platillos sobre la tumba como si fuera una mesa, las familias se postran alrededor y algunos contratan tríos huastecos y banda de viento, donde se entonan sones propios de la región.

La comida que llevan para compartir con sus familiares es la que retiraron de sus ofrendas, sus tumbas las adornan con flor de cempasúchil. Al camposanto acuden prácticamente todas las familias de los difuntos sepultados para colocarle flores y convivir con ellos durante todo el día.

Pobladores de Tutotepec realizan cada 2 de noviembre un festín en el panteón para recibir a sus difuntos, recordando la antigua práctica de la Llorada del Hueso / Cortesía Municipio San Bartolo

En Acatlán, realizan Feria de Muertos

Habitantes de las comunidades aledañas a Acatlán, tales como Almoloya, Alcholoya, Metepec, entre otras, acuden cada año al panteón de dicha localidad, espacio donde también se instala la tradicional Feria de Muertos y que congregan al menos a tres mil personas en el único día de celebración.

Contrario a lo que sucede en otros sitios, en Acatlán el festejo más grande es el día dos, por tal motivo es que desde el 27 de octubre comienzan a repartirse los lugares para interesados en poner puestos con flores, elotes, comida, dulces, pan o bebidas alcohólicas en la feria.

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