Tulancingo guarda su esencia en el comercio, sus calles céntricas son una mezcla de establecimientos que sin lugar a duda le da vida a esta ciudad. El municipio es conocido por ser un importante centro de negocios, lo que impulsa la diversificación del emprendimiento en la región.
Existen un total de 9 mil 881 Unidades Económicas pertenecientes al comercio, la industria manufacturera, los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, éstas emplean a 29 mil 041 personas siendo el 54.30 por ciento hombres y el 45.7 por ciento mujeres.
De acuerdo con la última actualización del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el municipio de Tulancingo matrícula un total de 268 mil 351 habitantes y un total de 9 mil 881 comercios registrados, por lo que, el 3.68 por ciento de la población cuenta con un comercio.
En este sentido, Berenice Osorno, directora de Reglamentos y Espectáculos de Tulancingo, informó en entrevista que el giro con más registros en el municipio son las misceláneas, las típicas tienditas de la esquina, seguidas de alimentos y bebidas.
“Es algo bien curioso porque aunque puede haber cuatro en la misma avenida, para todas sale el sol, porque de una manera u otro innovan, tal vez en una venden además de abarrotes fruta picada en la mañana y en otra en la noche venden café, por dar un ejemplo”, explicó.
Muchas de estas abarroteras o tiendas han pasado de generación en generación, por lo que la innovación de las nuevas generaciones es lo que hace que se mantengan en la actualidad, además de que muchos de los locales están en las propiedades, por lo que el pago de la renta no es un pasivo.
Respecto al segundo giro con más demanda: alimentos y bebidas, explicó la funcionaria que se debe a que Tulancingo es el punto de encuentro de venta de alimentos y condimentos, tan es así que hay diferentes plazas y tianguis durante la toda la semana, lo que hace que los platillos sean de un costo accesible para el consumidor, por lo que incluso, muchos de los comensales provienen de otros municipios.
Además, el comercio es tan indispensable y funcional para el ejercicio económico del municipio, que incluso, ha podido detectar gente foránea interesada de manera insistente en abrir diferentes negocios, pues Tulancingo es una excelente plaza de compra y venta.
“Es como una cadenita. Incluso hay muchas colonias que son autónomas, las más grandes y alejadas principalmente. Es muy raro que veas a algunos de los colonos trasladándose al centro para abastecer sus necesidades, pues en las colonias tienen tiendas, carnicerías, lavanderías, papelerías, farmacias, cocinas económicas, todo lo necesario para vivir, y entre ellos mismos se compran por lo que la economía circula”, explicó la funcionaria.
Puntualizó que si bien este oficio (el comercio) en muchos de los casos es heredado de generación en generación, el emprendimiento, la innovación y la tecnología le dan un nuevo aire al comercio local, pues si rentas un local y para vender algo, se apoyan de las redes sociales para difundir sus negocios, por lo que incluso la captación de clientes va más allá de lo local y eso repunta al Tulancingo como un municipio comerciante.
“He detectado un fenómeno, como bien dije antes, muchos de estos negocios son generacionales, y los jóvenes, los cierran para meter otro giro, pero si no les funciona, lo cierran y comienzan uno nuevo, el chiste es vender. Hay un caso en particular que tengo presente, de un restaurante muy antiguo, los dueños ya quieren descansar y lo heredaron a su hijo que es dentista y hace poco vino a hacer su cambio de giro porque va a abrir un consultorio”, explicó.
Aunque bien es cierto que la dirección de reglamentos lleva un registro de comercios, la funcionaria municipal puntualizó que es casi imposible saber el total de los comercios o comerciantes, pues además de haber comercio informal, hay un mundo flotante de comercios no registrados, pues a la par que crece la ciudad, crecen los locales comerciales.
“Muchos, la gran mayoría tiene registro comercial, pero algunos más no, ni siquiera conocen de la dirección de reglamentos, por ejemplo, a la fecha, me siguen llegando personas que no pagan aquí porque supuestamente pagan a AC o cooperativas (obviamente apócrifas) y cuando viene acá pues se llevan la sorpresa que no están registrados o no llevan pagos al corriente”, lamentó.