TULA DE ALLENDE, Hgo.- Un proyecto social de agricultura regenerativa, para crear granjas y huertos de traspatio en torno a un modelo de agronegocios, está desarrollando el colectivo Corazones Verdes en comunidades del municipio.

Rosa María Aguilar Martínez, fundadora de Corazones Verdes, explicó que lo que están haciendo con este proyecto es fusionar la experiencia del campo tradicional con el traspatio para ofrecer a las familias la posibilidad de producir lo que consumen e incluso distribuirlo en la cadena de comercialización corta del municipio, en donde se ofrecen primero con sus familias y en la comunidad.

El colectivo está integrado por 52 personas en diversas comunidades y es resultado del proyecto de tesis de la maestría en negocios de Rosa María Aguilar, quien es ingeniero químico, el cual propone recuperar zonas agrarias y agrícolas en espacios urbanos, para que no se pierda la tradición del traspatio, a través por lo que no tiene fines de lucro.

“Surge en 2020, cuando arrancamos el proyecto piloto en un terreno en la zona urbana, en la comunidad de Iturbe que es nuestra última zona agraria-agrícola. En el fraccionamiento Lomas de Iturbe, construimos la huerta y la granja, al mismo tiempo porque teníamos que alimentar a nuestras aves porque estas solo se alimentan de lechuga, brócoli, cereales altos en proteína, para que tengan una buena formación y puedan poner huevo durante todos sus ciclos de postura.”

En cuanto a la producción agrícola se les enseña desde la germinación, recolección y comercialización, y en las aves se enseña desde su cría, desarrollo, alimentación, postura y comercialización y se busca darles todo tipo de asesoramiento técnico y fitosanitario y un modelo de agronegocio en donde la población tenga asegurada una alimentación, pero además con estos proyectos, Aguilar Martínez busca incorporar a personas con capacidades diferentes.

En este mes de enero, explicó, tendrán la primera producción agroecológica en la comunidad de Xiteje de Zapata, donde un grupo de ocho personas participaron en la siembra de una pequeña milpa, con frijol negro, bayo, alverjón, haba, calabaza y maíz. Pero tienen también un proyecto exitoso en San Miguel Vindhó, donde construyeron una planta hidropónica, que se llama Huertas Tello.