La figura de bebé de Jesús oscila entre 200 y 350 pesos, según tamaño y es uno de los símbolos más característicos en la Cena de Nochebuena, pues se le "arrulla" para celebrar la bienvenida del Niño Dios al mundo y se realiza antes de iniciar con los alimentos, expresó Nadia Cervantes, vendedora.
El más pequeño mide 25 centímetros, sigue el de 35 con valor de 250 pesos; el de 45 de 300 pesos y el más grande de 65 centímetros, de 350. Simula un bebé acostado y debe ser vestido de blanco, sin embargo, hay familias que prefieren ropas de profesiones como de doctor, que es una de las más socorridas.
Las ropas tienen un valor aparte, que van de los 200 a 300 pesos, incluye zapatitos, gorra y vestido.
“Sigue la tradición de arrullar al Niño Jesús antes de comenzar con la Cena de Navidad. Son las madres de familia quienes más inculcan a sus seres queridos la tradición”.
De acuerdo a la publicación católica Desde la Fe el presbítero Rubén Sandoval, responsable de la Comisión de Religiosidad Popular de la Arquidiócesis de México, esta tradición de “arrullar al niño Dios es un signo que amamos a Jesús, el hijo de Dios, pero también de que los papás aman a sus hijos, pues ese arrullo a esa figura, es como si los padres arrullaran y consolaran a sus hijos”
En el “arrullo” se cantan canciones de cuna y quienes asisten a la cena navideña se turnan para cargar al Niño mientras todos le cantan para celebrar las primeras horas de nacimiento de Jesús.
Para realizarlo, primero, se realiza una oración y posteriormente se le “arrulla” sobre una sábana blanca para ser acostado en el pesebre.