Existen baños de temazcal que lo hacen por negocio y no cumplen con los requisitos que marca la tradición de “sembrarlos” correctamente y contar con el personal capacitado bajo una ceremonia, ya que los tradicionales no cobran reciben una aportación voluntaria, informó la “abuela” Isabel Macotela con 13 años de experiencia e integrante dela Asociación de Temazcales de Hidalgo.
Explicó que la instalación se hace lejos de una carretera y panteón, debidamente cercado “donde se colocan los cuatro elementos (aire, tierra, fuego y agua) y las cuatro deidades que representan a los elementos, bajo un ritual se consagra el lugar”, para que quien acuda tenga una experiencia espiritual “porque se abren portales”. Sus efectos son medicinales, culturales y de sanación, afirmó.
Quienes “cobran” desde 400 hasta los3 mil 500 pesos no realizan todo el procedimiento característico de las culturas Mexica, Chichimeca o Hñähñu, puesto que lo hacen por “negocio” y en otros casos solo es por la venta de los hongos, la ayahuasca o el peyote, señaló sin dar ubicación, nombres y cantidad de los que están en Hidalgo. “Nosotros damos un servicio, y la gente que acude otorga una aportación voluntaria, no andamos creando baños de temazcal por negocio, lo hacemos por sus efectos medicinal y de sanación, como de abrir conciencias; entregamos la medicina sin condiciones”, resaltó.
Acumula 13 años de experiencia y ha pasado distintas ceremonias para alcanzar el grado de “abuela” que va ligado a su edad, recibió un bastón de mando, y desde 2019, en Hidalgo se constituyó la asociación con baños de temazcal en San Agustín Tlaxiaca, Apan, Zapotlán, Huasca, Mineral de la Reforma y Atotonilco.
La diferencia entre los que se “siembran” correctamente y los que son por negocio, subrayó, radica no solo porque en los segundos cobran, también en el proceso de la experiencia conforme a un ritual.