ACTOPAN, Hgo. En la primera semana de administración pública municipal, tanto empleados de la Comisión de Agua y Alcantarillado del Municipio (CAASA), como de Protección Civil y Bomberos, dieron a conocer una serie de inconformidades.

En el caso del órgano operador del agua potable, trabajadores dieron a conocer su preocupación con las disposiciones del nuevo director Rafael Granados Ángeles, pues ha solicitado la presencia de todo el personal.

Señalaron que los mayores de 60 años se encuentra bajo confinamiento y con problemas de salud como es la diabetes. “No nos oponemos a trabajar, tenemos toda la disposición laboral, pero hay compañeros que bajo esas condiciones no pueden venir y arriesgarse a contraer el virus”, indicaron en entrevista con El Sol de Hidalgo, quienes tras mostrar su identificación como personal de CAASA, pidieron el anonimato por temor a represalias. Indicaron que al menos ya hubo cuatro reportes positivos con Covid-19, entre ellos una empleada contagió a su madre y esta, lamentablemente, perdió la vida.

“Nos dijo el director que le sale más barato liquidarnos. Creemos que la alcaldesa Tatiana Ángeles no está enterada de lo que aquí sucede porque sabemos de su solidaridad con las personas”, reiteraron.

En tanto, en el edificio de Protección Civil y Bomberos, trabajadores entregaron un documento a la Secretaría General Municipal que obra una copia en poder de El Sol de Hidalgo, donde mencionan su protesta a la designación de comandanta a Micaela Mejía Sánchez. En el oficio los quejosos consideraron que aún no es merecedora del cargo, pues le faltan dos de los diez años que debe tener para aspirar a la titularidad.

Además, indican que hay más de sus compañeros que reúnen los requisitos, especialmente de conocimientos. En ambos casos, el servicio al público es permanente y se entrega de manera ininterrumpida. Su petición es una audiencia pública con la presidenta municipal Tatiana Angeles Moreno.