Algunas personas con discapacidades físicas y motrices, se sienten discriminadas y encuentran pocas probabilidades de encontrar un empleo formal; optan por comercio ambulatorio o en casos extremos, pedir ayuda económica a las personas que deambulan en las principales calles de la ciudad.
Así lo informaron algunas personas con capacidades diferentes, en su mayoría adultos mayores, quienes, a falta de un empleo formal, y con la intención de ser productivos, dedican su tiempo a la venta de dulces, o productos que de acuerdo a sus posibilidades puedan realizar.
Y que, en casos extremos, y al estar bajo la necesidad de suplir sus necesidades básicas, optan por pedir dinero y se postran a fuera de los establecimientos más concurridos de la ciudad, como lo son los bancos y restaurantes de la zona.
Comentan que, una razón más por laque se llegan a sentir discriminados, es porque la infraestructura de la ciudad noes incluyente con alguno de ellos, y les es difícil el trasladarse, lo mismo les sucede con el transporte púbico, quienes en repetidas ocasiones se han negado a subirlos, porque tardan un tiempo considerado en poder abordar la unidad.
Explican que muchos de ellos, antes de dedicarse a sus oficios, tenían el respaldo de sus padres o hermanos, quienes les proveían de lo necesario para poder vivir, pero que, al morir algunos de estos, quedaron desamparados y han buscado la manera de tener un ingreso.
Y que, a pesar de ser personas con capacidades diferentes, disfrutan de lo que hacen, pues es un trabajo honrado como cualquier otro.