En lo que va del año ha habido 50 repatriaciones de migrantes hidalguenses fallecidos, señaló Alma Lidia de la Vega Sánchez, subsecretaria de Desarrollo Social y Humano de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso). Los 50 fallecieron en territorio estadounidense, por causas naturales y accidentes, mientras que otros dos perdieron la vida en su intento de cruce hacia Estados Unidos, vía río Bravo en territorio mexicano, en específico Ciudad Acuña, Coahuila. Cuando ocurre este tipo de situaciones el familiar del migrante fallecido hace contacto con la Sedeso estatal y, a su vez, establece comunicación con la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para que con su red consular inicie la comunicación con los familiares.
En tanto, personal de la Sedeso asesora a los familiares para la búsqueda de servicios funerarios en Estados Unidos. Los gastos corren por cuenta del consulado y familiares para que llegue a la Ciudad de México; de este sitio hacia el lugar de origen los gastos económicos son absorbidos por Gobierno del Estado. En el caso de los dos recién fallecidos, quienes eran originarios de Nicolás Flores, fueron apoyados con el traslado desde la frontera hasta su lugar de origen, en coordinación con el municipio. Debido a su muerte aún en territorio mexicano, sus viudas serán incluidas en el programa estatal de Fondo de Apoyo al Migrante, para recibir el proyecto productivo, “fue una instrucción del gobernador Omar Fayad”, dijo la Vega Sánchez.
Agregó, que anteriormente el consulado tenía mayor número de recurso económico para apoyar en la repatriación. Con el recorte federal, se recomienda a la familia buscar servicios funerarios más accesibles, sin embargo, la mayoría opta velar a su ser querido en su lugar de origen. La subsecretaria insistió que el que quiera migrar no se arriesgue sin tomar en cuenta las medidas y que consideren evitar cruzar y se queden en el estado, “estamos buscando que las condiciones mejoren para que las personas no tengan necesidad de irse”.