“Los migrantes en Estados Unidos están enviando mayor cantidad de dinero en remesas a México porque sus familias enfrentan hambre y falta de dinero, no porque estén a apoyando el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que ni nos ve ni nos escucha, no es un logro de su gobierno”, opinó Mario García, dirigente de la asociación Migrantes Impulsores del Desarrollo.
Desde Nueva York, dijo, vio el segundo informe de gobierno del mandatario y le pareció una burla que “se parara el cuello” por los miles de millones de pesos que llegaron desde el exterior a los bolsillos de las “familias pobres y afectadas por el Covid-19”.
No se puede aplaudir al Presidente, cuando en los Consulados mexicanos en EU hubo un recorte presupuestario y ahora “si un paisano muere, familiares y amigos se truenan los dedos y hasta se endeudan para reunir el dinero para repatriar los restos mortales y que sean sepultados en su tierra natal”.
El gobierno de Donald Trump los rechaza y hasta los violenta verbalmente con sus discursos, en México “somos invisibles, solamente en tiempos electorales nos toman en cuenta y como siempre, pasando las votaciones, volvemos al baúl del olvido”, criticó.
Como ejemplo citó a varios exdiputados locales y federales de Hidalgo, y como en el caso de Ixmiquilpan, donde hasta hay casas de cambio tienen, “donde especulan con el tipo de cambio de dólar a pesos mexicanos, obteniendo una ganancia a costa de los mismos ixmiquilpenses”.
Señaló que según un conteo de EU del 2011, había 33.6 millones de mexicanos en ese país, ni con esa cifra pudieron mantener una representación entre los diputados de la CDMX, que este año se las quitaron, “otra vez nos desaparecieron, como siempre, nos quieren lejos, pero mandando dinero”.