El fin de cada año son fechas de reencuentro entre los migrantes que regresan de Estados Unidos y sus familias, donde organizan convivios y festejan fechas memorables que los conectan con sus raíces, costumbres y tradiciones.
Los migrantes mantienen contacto vía redes sociales o teléfono en desde EEUU y México, sin embargo el contacto físico y la convivencia no se reemplazan con llamadas o mensajes.
Las fiestas que se conmemoran son diversas, desde festejos de XV años, bodas, bautizos, fiestas patronales, primeras comuniones, cenas de fin de año, o simplemente convivios por el gusto de reencontrarse.
Los migrantes que ya tienen papeles (doble ciudadanía) regresan cada año y en diferentes meses de enero a diciembre, sin embargo hay migrantes que se van por 5, 10 o 20 años.
En este tiempo no ven a su familia, por lo que cuando regresan ya ni conocen a sus hijos, sobrino o nietos, el tiempo no perdona, mencionó Alfonso Corona, migrante ixmiquilpense que llegó a México, proveniente de Florida, EEUU.
En las fiestas se invita a todos los familiares se hornea barbacoa, ximbo, se hace mole, ya que los migrantes extrañan los guisos y gastronomía del Valle del Mezquital.
Las bebidas tradicionales no pueden faltar, como el pulque o los curados.
Los migrantes están en México máximo quince días ya que tienen que regresar a su trabajos en EEUU.
También te puede interesar: Migrantes hidalguenses pasan fría navidad
Algunos vienen por carretera otros optan por volar en avión y otros por autobús.
Recordamos con cariño nuestra tierra que tuvimos que dejar para superarnos y brindar mejor calidad de vida a nuestra familias, expresó Alfonso Martín, migrante indígena.