El 30 por ciento de propietarios cuyos perros se han visto involucrados en agresiones, ya sea entre canes o a humanos, los deja en el antirrábico para ser sacrificados.

Los dueños de mascotas, principalmente de raza pitbull, refieren que sus animales les han causado problemas y por esa razón no los reclaman o dan la autorización para ser sacrificados, comentó el director de Salud Municipal de Tulancingo, Tomás Marroquín.

Los animales, tras verse involucrados en una agresión, dijo, deben estar bajo observación diez días para ser valorados por la Jurisdicción Sanitaria y posteriormente, si no hay ningún problema, el propietario decide si su mascota es sacrificada o se la lleva.

Comentó que, en caso de denuncia de perro por agresión, el poseedor debe pagar una multa, la cual depende de la gravedad, ésta aumenta si el animal es azuzado y también podría sumarse una denuncia judicial, lo que depende del agredido.