Con 92 mil 426 pesos, Jesús Jaimes y Rita Fernández de Jardín Mayahuel ubicado en Singuilucan, continuarán con la Preservación del oficio de Tlachiquero y la cultura del maguey en la zona alta de este municipio.
Ellos son dos de 280 productores de pulque en la demarcación, pero van más allá de la importancia del consumo. En su objetivo, destacan reconocer a aquellas personas que se dedican a la producción del “agua de las verdes matas”, que la labor no sucumba, pero a la par, que el maguey no se extinga.
Numerosas personas, dicen los galardonados, extraen el aguamiel para la producción de pulque con fines de autoconsumo, en un 30 ó 40 por ciento, el resto, es para la comercialización y precisan que la planta agavera tiene propiedades curativas.
Avecindados en la comunidad La Raya en Singuilucan, han hecho de su hectárea donada por el Ejido, un sitio donde han sembrado varias especies de maguey como cimarrónico (cenizo y verde), chamino y el que se utiliza más para pulque es el maguey manso, para que éste repueble zonas donde se ha extinguido. Aunado al mexicano, púa larga, el meco, entre otros que producen buen aguamiel.
El igual llamado “Árbol de las Maravillas” seguirá preservándose en este punto de Singuilucan por parte de Jesús y Rita quienes encabezan este proyecto.
Su sueño es que se sigan albergando plantas. Además de motivar a los productores de éste y otros municipios preservando el maguey.
Ser tlachiquero es todo un oficio que implica no solo tiempo sino conocimiento del tema, por ello es que ahora en el concurso donde resultaron beneficiados con ese recurso, seguirán proyectando dentro de un plan integral la labor, para que ésta no muera.
Su primer logro fue en febrero de 2016 cuando comenzaron a consolidar su proyecto colectivo de conservación y difusión. Fueron acreedores de PACMyC a través del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y la Dirección General de Cultural Populares, donde además de producir pulque, hacen destilados, artesanías e instrumentos musicales, y miel de aguamiel.