TULA DE ALLENDE, Hgo. Damnificados de las inundaciones de septiembre, que fueron beneficiados por parte del gobierno municipal con colchones, que resultaron ser de mala calidad, entregaron ayer un lote de cincuenta piezas, que serán aportados como evidencia, en una investigación que lleva a cabo la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Tras la inundación, algunos damnificados fueron beneficiados con colchones, pero en febrero después se percataron que estos eran reconstruidos, con materiales de desecho. Denunciaron que algunos contenían en su interior parásitos, por lo que al menos un centenar los quemaron frente a la alcaldía, otros los tiraron, y algunos se guardaron como evidencia, pues se entregaron más de 300 piezas.
Una de las empresas que se sumó con el gobierno municipal en la donación, tras ofrecer disculpas, dio a conocer en un comunicado el 10de febrero pasado, que iniciarían un proceso ante las autoridades para buscar el reembolso y la pena que corresponda, por la mala calidad del producto entregado por el proveedor, porque ellos aseguran haber pagado un costo unitario de 853 mil pesos, a la mueblería con que contrató la alcaldía la compra de los colchones.