TULA DE ALLENDE, Hgo.- La indignación por el abandono gubernamental, que aseguran han sufrido durante tres semanas, desde el desbordamiento del río Tula, crece entre los damnificados y la noche del lunes, enfrentaron a la autoridad municipal para reclamar que están hartos de censos y reuniones estériles y exigieron que se destinen recursos federales para el pago de daños.
Tras manifestarse un grupo de más de trescientos damnificados y cerrar calles, fueron recibidos por el alcalde Manuel Hernández Badillo, quien recibió una andanada de críticas.
Gabriela Tovar González, afectada de la calle Leandro Valle, señaló de entrada que las reuniones con la alcaldía son inútiles, “porque qué nos pueden resolver si ellos no tienen dinero y necesitamos que venga un representante del gobierno federal y ya nos diga, que nos van a dar”.
También aseguró que el gobierno del estado está reteniendo la entrega de comestibles y productos de limpieza, donados por otros gobiernos, empresas y ciudadanos y por qué hacen eso, estamos en una emergencia.
La gente tiene necesidades y el día que vinieron los de la Cruz Roja, la gente tuvo que esperar tres horas para recibir una despensa.
Eso no es justo, ni es humanitario porque esa leche que tienen guardada la necesita un niño, o qué se las van a llevar los funcionarios, recriminó la mujer en tono molesto.
Expuso que los ciudadanos necesitan que vengan a Tula funcionarios del gobierno federal que tengan poder resolutivo.
