Familiares de la joven Anahí, asesinada en su casa en el fraccionamiento La Colonia, entre la noche del martes ocho de noviembre y madrugada del siguiente día, exigen que no quede impune y el culpable sea detenido para que reciba el castigo legal.
A una semana del crimen ocurrido en Mineral de la Reforma a una egresada de la carrera de Criminología, la abuela materna, Silvia Hernández, dijo que funcionarios de la Procuraduría de Justicia estatal con quienes se reunió el lunes 14 de noviembre, le informaron, sin dar detalles, que hay “avances”.
La familia de la occisa, ha atravesado de “una desgracia a otra”, pues sobrevive el hermano, ya que el padre murió en un accidente hace 11 años aproximadamente, la mamá hace un año por Covid-19, y ahora su nieta, quien tenía 24 años de edad, era una joven “que no daba problemas, se divertía normal como cualquier persona de su edad, iba a fiestas.
“Era buena alumna y hasta becas le dieron; no tenía enemigos”, apuntó.
Una amiga, con quien había acordado comer juntas y como no llegó Anahí a la cita, la fue a buscar a su domicilio el miércoles nueve de noviembre, es quien encontró el cuerpo sin vida, avisó a las amistades y una de ellas le informó al hermano y éste a los familiares.
“Que no quede impune (su muerte). Yo sé que ya no la voy a revivir y no la voy a volver a ver”, pero la justicia debe dar con quien le arrebató la vida, y no quiere que se convierta en un episodio de complicidad entre los funcionarios de la Procuraduría y quien la asesinó, como ha conocido la noticia de Ariadna Fernanda, en la que las autoridades de Morelos informaron que murió de congestión alcohólica y el gobierno de la Ciudad de México afirmó fue un feminicidio.