El Hospital General del Altiplano, ubicado en Apan, se convirtió en la sede para la implementación del programa Club del Embarazo, a través del cual se fortalecerán las estrategias para brindar una atención integral y de calidad a las embarazadas, entre estas privilegiar el parto natural, fortalecer el control prenatal e impedir la violencia obstétrica.
Héctor Bonilla Sánchez, director del nosocomio, refirió que la secretaría de Salud, Zorayda Robles Barrera, desplegó este programa que busca disminuir el índice de cesáreas, muertes maternas y morbilidad en mujeres, además de brindar servicios de ginecología y atención prenatal con un equipo de especialistas quienes llevarán el control del embarazo desde su detección, hasta el parto.
Explicó que, con la participación de catorce mujeres, residentes de diversos municipios que integran esta región del estado, se inauguró el club, cuyo objetivo principal es reducir el número de intervenciones quirúrgicas por cesárea.
Detalló que, actualmente, en este centro médico, 38 por ciento de las pacientes que dan a luz lo hacen a través de cesárea, pero que la meta para este 2023, es reducir esta cifra a 20 por ciento.
Con el Club del Embarazo, dijo, devienen otras acciones como la erradicación de la violencia obstétrica, la cual se genera al infringir maltrato a las embarazadas en diversos ámbitos entre estos el que no sea juzgada, atemorizada, humillada o lastimada física y psicológicamente.
Detalló que, algunos actos constitutivos de violencia obstétrica son practicar la cesárea cuando existen condiciones para un parto natural, sin el consentimiento voluntario, expreso e informado de la mujer, obligarla a parir acostada o inmovilizada, negar u obstaculizar la posibilidad de cargar y amamantar a su bebé.