Donde hay agua, hay vida. Ese es el caso en la Tierra, al menos, y también la razón por la que los científicos siguen atraídos por cualquier evidencia que sugiera que hay agua líquida en el frío y seco Marte, lo que podría echarse abajo con los últimos estudios publicados que indicarían que se trata solo de arcilla.
En 2018, cuando un equipo dirigido por Roberto Orosei del Istituto Nazionale di Astrofísica de Italia anunció que había encontrado evidencias de lagos subterráneos muy por debajo de la capa de hielo en el polo sur de Marte.
Alessandra Perilli, logra la primera medalla en la historia de San Marino
La evidencia que citaron provino de un instrumento de radar a bordo del orbitador Mars Express de la ESA (Agencia Espacial Europea).
Las señales de radar, que pueden penetrar la roca y el hielo, cambian a medida que se reflejan en diferentes materiales.
En este caso, produjeron señales especialmente brillantes debajo del casquete polar que podrían interpretarse como agua líquida. La posibilidad de un entorno potencialmente habitable para los microbios era emocionante.
Pero después de observar más de cerca los datos, junto con experimentos en un laboratorio frío aquí en la Tierra, algunos científicos ahora piensan que las arcillas, no el agua, podrían estar creando las señales.
En el último mes, un trío de nuevos artículos han desentrañado el misterio y pueden haber secado la hipótesis de los lagos.
No hay forma de confirmar cuáles son las señales brillantes del radar sin aterrizar en el polo sur de Marte y excavar kilómetros de hielo. Pero los artículos recientes han ofrecido explicaciones plausibles que son más lógicas que el agua líquida.