Aproximadamente 48 horas fueron suficientes para que el grupo parlamentario del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) aprobara la reforma al código penal de la entidad que despenaliza el aborto antes de las 12 semanas de gestación.
Con ello, Hidalgo es la tercera entidad del país en la que se podrá interrumpir legalmente el embarazo. Las otras dos son Ciudad de México y Oaxaca.
La iniciativa fue presentada el pasado lunes 28 de junio por la diputada morenista Roxana Montealegre, presidenta de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, precisamente el grupo de trabajo al que fue turnada la iniciativa para su análisis y dictaminación.
Ella misma convocó a la reunión de dicha Comisión, la cual se realizó en la tarde del martes 29 sin la presencia de las diputadas y disputados de otras fuerzas políticas que forman parte de ella. Ese mismo día la dictaminaron y de inmediato se dio a conocer que el tema estaba incluido para su discusión y, en su caso, aprobación, en el orden del día de la sesión de ayer miércoles 30 de junio.
A partir de ese momento hubo rechazo de parte de las otras fuerzas políticas representadas en el Congreso local, como PRI, PAN, PESH, PT y PANALH, por considerar que hubo diversas violaciones a la Ley Orgánica del Poder Legislativo de la entidad.
Aún así la fracción de Morena mantuvo el dictamen en el orden del día y cuando se llegó al momento de su discusión, los opositores multiplicaron las voces para expresar desde la tribuna que no se había respetado el procerso legislativo por parte de la presidencia de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, por lo cual exigieron, una y otra vez, que se debatiera el tema y que no se sometiera a votación.
No obstante, el presidente de la Mesa Directiva, el también morenista, Ricardo Baptista, dijo que el tema estaba suficientemente discutido y por lo tanto tomó la decisión de someterlo a votación.
Mientras los opositores gritaban que era una ilegalidad, uno a uno, 16 de legisladores de Morena se pusieron de pie para anunciar el sentido de su voto, en favor del dictamen presentado.
Fue así como se aprobó la reforma al Código Penal, minutos antes de las 13:00 horas de ayer miércoles.
Cabe señalar que esta fue la segunda ocasión en que se presentó la iniciativa de reforma. La primera vez fue en la sesión del 12 de diciembre de 2019, cuando entonces la hoy diputada promovente, Roxana Montealegre, se abstuvo de votar.
Pocos minutos después de las 11:00 horas de ayer miércoles comenzó la discusión sobre el tema y fue entonces cuando la diputada del Partido Encuentro Social Hidalgo (PESH), Jajaira Aceves Calva, acusó que los legisladores de Morena actuaron por intereses personales, “debido a que buscan algún `hueso` político, y por ello decidieron votar esta iniciativa después de las elecciones del pasado seis de junio”.
Por su parte, el legislador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), José Luis Espinosa Silva, también señaló que se cometieron diferentes irregularidades, pues no fue convocado a la sesión de la comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, por lo que se pronunció en contra de la misma.
También las diputadas del Partido Acción Nacional (PAN), Claudia Lilia Luna Islas y Teodora Islas, refirieron que hubo varias irregularidades para votar la iniciativa que apenas fue presentada en el pleno el lunes pasado y el martes aprobada en comisiones para ser votada en el pleno en apenas 48 horas.
La diputada priísta Mayka Ortega Eguiluz acusó que Morena pretendía imponerse por la fuerza al dejar de negociar con las bancadas, violando las leyes.
La diputada priísta Adela Pérez Espinosa calificó a los legisladores de Morena de “hipócritas”, por lo que los legisladores locales no actuaron bajo la legalidad, sino a través de una imposición política simulada de representatividad.
Aunque habían otros legisladores que querían pronunciarse como Miguel Ángel Peña Flores y María Luisa Pérez Perusquía, el presidente de la Mesa Directiva del mes de junio, Ricardo Baptista González, otro de los promoventes, consideró que estaba suficientemente discutida la iniciativa y tendría que ser votada.
Ante ello, el presidente de la Junta de Gobierno, el panista Asael Hernández Cerón, subió a tribuna y acusó a los legisladores de Morena “de ser mentirosos y cínicos”.
Sin embargo, Ricardo Baptista siguió adelante y sometió a votación el dictamen, el cual fue aprobado con 16 de los 17 votos de Morena, con la abstención de la legisladora morenista Doralicia Martínez Bautista.
En consecuencia Asael Hernández advirtió que impugnarían este dictamen ante el Tribunal Electoral del Estado de Hidalgo (TEEH).