Desde hoy comienza la tradición de encender veladoras de acuerdo a la costumbre mexicana de Día de muertos, declarada como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad en 2008, y hasta el dos de noviembre pues cada día tiene un significado particular.
Este 28 de octubre, al mediodía, con base en las creencias de quienes conmemoran estas fechas, se debe encender una veladora blanca, dedicada a aquellos que murieron de forma trágica.
En tanto que el 29, otra luz para los ahogados y se coloca un vaso de agua; el 30 se recibe a las ánimas solas y olvidadas, además deben colocar pan.
El 31 se espera a las almas que están en el limbo, que no nacieron o no estaban bautizadas y se coloca la ofrenda.
Mientras que el uno de noviembre, Día de Todos los Santos, se prenden para aquellos que murieron siendo niños, y el dos, Día de los Fieles Difuntos, se dedica a los que partieron de este mundo siendo adultos.
El tres de noviembre se tiene por costumbre levantar la ofrenda.