Junio, es el mes de veneración dentro de la grey católica, del Sagrado Corazón de Jesús. Desde el siglo XVII se enfatiza en la devoción y extiende su apostolado, aunque la Iglesia refiere que desde el siglo XII con San Bernardo de Claraval, San Buenaventura y Santa Catalina de Siena.
Narra la historia que fue el 16 de junio de 1675, cuando Santa Margarita María de Alacoque, conoció del propio Jesús, su corazón (rodeado de llamas, coronado de espinas y con una herida abierta de la cual brotaba sangre). Del interior del mismo salía una cruz.
Santa Margarita lo escuchó decir: “He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres, y en cambio, de la mayor parte de los hombres recibo ingratitud, irreverencia y desprecio”.
A decir de sacerdotes de la Arquidiócesis de Tulancingo, -quienes durante este mes realizan oraciones por la Pastoral Familiar-, la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, invita a practicar la humildad.
De hecho, en esta ciudad de Tulancingo hay una iglesia cuya advocación es al Sagrado Corazón, ubicada en la calle Aquiles Serdán en la colonia Francisco I. Madero.
Fue en 1856 cuando el Beato Pío IX extendió la festividad a toda la Iglesia. La celebración dentro de los recintos eclesiásticos, aunque es todo el mes, tiene su fecha para este 2019, el primer viernes, luego del segundo domingo de la celebración de Pentecostés, es decir, para el 28 de este mes.
