“En México no hay justicia, se utiliza para perseguir a los adversarios políticos y, en otras, por consigna”, consideró Rosario Robles durante su ponencia “El abuso de la prisión preventiva y los derechos humanos de las mujeres”, en el Congreso Nacional de Derechos Humanos y Juicios Orales 2024 con sede en Pachuca.
Como ejemplo habló del exprocurador Jesús Murillo Karam, quien se encuentra recluido por el proceso penal en su contra por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, a quien defendió al asegurar que él no tiene nada de injerencia en el caso.
Está en prisión, enfermo y pudiera irse a arraigo domiciliario, mientras que otros sí tienen esa opción, por lo que debe actuarse con la ley en la mano
La exjefa de Gobierno de la Ciudad de México y exfuncionaria en la administración de Enrique Peña Nieto, recalcó que la aplicación de la justicia debe ser como se representa, ciega. No importa sí los involucrados son personas poderosas, ricas o pobres, debe ser justa.
Agregó que en México la justicia no es primordial y lo entendió bien en los años de pandemia, porque se cerraron los juzgados, se suspendieron las audiencias, fue un año después, en 2021, todavía en la emergencia sanitaria, cuando reiniciaron su implementación pero de forma virtual.
“En la pandemia sólo se atendieron los casos que convenían políticamente, incluso de inmediato había sentencia”, expresó ante los asistentes entre estudiantes de la licenciatura en Derecho y abogados.
De su experiencia en la prisión, en la que estuvo tres años, 2019-2022, acusada de ejercicio indebido del servicio público en su modalidad de omisión, indicó que hay grandes injusticias para las mujeres, “hay quienes tienen en la cárcel 18 años sin haber sido sentenciadas, porque sus casos no interesan”.