Ajacuba, Hgo.- Gracias a la producción de pulque, Mateo Bautista ha sacado adelante a su familia desde hace muchos años.
A temprana hora del día y hasta entrada la tarde, hace su ardua labor, diariamente, para preparar esta deliciosa bebida prehispánica.
El tinacal de Mateo Bautista está en el pintoresco poblado de Puerto México, situado al oriente del municipio de Ajacuba y rodeado de vegetación propia del Valle del Mezquital predominando las magueyeras.
Con los primeros rayos del sol, Don Mateo, como lo conoce mucha gente, hace su primera raspa del maguey para extraer el aguamiel y preparar uno de los mejores pulques extraído del maguey Shamini y Manzo como lo comento.
Mientras raspaba sus magueyes con cierta nostalgia y preocupación, el informante dijo que ya las magueyeras se están acabando, primeramente porque los depredadores de los escamoles destruyen los magueyes para sacar el producto de la hormiga que es muy cotizado en el mercado.
“Da tristeza ver cómo se va extinguiendo la planta del maguey. En lo que a mi corresponde, cada temporada propicia siembro y cultivo el maguey para que así las nuevas generaciones puedan disfrutar lo que es un suculento pulque natural y una barbacoa incomparable aunque el maguey tarda de ocho a diez años en producir” así relato Don Mateo.
El entrevistado refirió que aquí en Puerto México hay otros productores que también distribuyen su pulque en varias zonas de la región.
Señalo que su pulque le da para sacar adelante a su familia y este noble oficio lo heredo de su padre, quien desde las épocas de los años sesentas, junto con otros tlachiqueros de la zona, surtían con barricas y cueros de toro las cantinas de la Ciudad de México.
Refirió que desafortunadamente las nuevas generaciones están olvidando sus orígenes prehispánicos, pero tiene la confianza en que retomen lo nuestro y representativo.