La Biblioteca Nacional de México, al igual que diversas instituciones en el mundo, se ocupa de preservar sus colecciones y de la difusión del conocimiento, ya que los textos son la herencia del pasado, el libro explora el proceso de comunicación y las palabras son acervos culturales de las comunidades y de la humanidad.
En lo anterior coincidieron especialistas al participar en ciclo internacional “Una cita en la Biblioteca Nacional de México: actualidad y porvenir de la historia del libro y la edición tras la pandemia”, organizado por el Programa Historia del Patrimonio Documental Mexicano, del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la UNAM.
Para Guadalupe Valencia García, coordinadora de Humanidades de la UNAM, los conceptos que surgen de las palabras nos ayudan a conocer el mundo. Destacó que existen textos “que transmiten ideas y pensamientos que viven y palpitan; ya Richer nos decía que texto es aquello que se realiza como discurso escrito y se destina a un lector, que al interpretarlo puede abrirse a la comprensión de sí”.