TULA DE ALLENDE, Hgo.- "Casi ya no se venden los juguetes tradicionales que hago con madera a mano como baleros, trompos, carritos, guitarritas y maderitas porque ahora la gente prefiere comprar juguetes modernos y eléctricos.
Sin embargo, le echo muchas ganas diario para ofertar esta mercancía artesanal en la calle en esta ciudad, junto con mi esposo José Vargas, para sacar adelante a nuestros tres menores hijos y confiamos que en las próximas fiestas de fin de año se vendan más".
Así lo expresó ayer Victoria Martínez, quien agregó que los artículos artesanales a veces se venden y a veces no. Aseguró que ella y su familia son nativos de una comunidad indígena náhuatl y hablan el dialecto náhuatl y español. Con mucho amor, dijo, elaboran a mano diversas artesanías que ofertan en la vía pública, entre ellas maderitas, pulseras, mochilas, cucharas de madera, yengas y xilófono.