En el procedimiento para la liquidación del partido local Más por Hidalgo, el dirigente Carlos Vázquez Reséndiz, la mayor preocupación es que el personal contratado desde hace tres años obtenga un justo pago por su desempeño, debido a que la pandemia ha dificultado la creación de empleos.
Informó que todos los lineamientos para la entrega de los bienes muebles “porque inmuebles no tenemos” aún no se los ha dado a conocer la autoridad del Instituto Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH) y nombrar a la persona que se encargará para revisar el listado de las posesiones.
Su mayor interés es con las ocho personas que siguen trabajando, que firmaron un contrato, para que su liquidación no signifique una complicación para enfrentar en estos momentos la pandemia del Covid-19; estimó que se llevarían un mes en el proceso.
“Los inmuebles en condiciones de tener vida útil se donan al Sistema DIF estatal”, apuntó.
“Para nosotros un lápiz y un papel eran suficientes para trabajar”, sin embargo, lo comprado era semi-nuevo que todavía podían sacarle provecho para la misión partidista y lo gastado “todo se quedó en el estado”, aunque acudieron a la Ciudad de México a cotizar publicidad, en eso quedó nada más y no dejan deudas.
Iniciaron un primero de julio de 2018 y el partido tuvo sede en un edificio de la calle Allende y luego se mudó al bulevar Colosio, por lo que no hay ninguna propiedad inmobiliaria, reiteró. A los representantes populares que fueron electos en los comicios municipales de 2020, los conmino a trabajar por y para la gente, aunque dijo que hubo quienes utilizaron a Más por Hidalgo “para sus intereses personales”, los menos.
En el marco jurídico que norma la vida de los partidos políticos es que si no obtienen como mínimo un tres por ciento de los votos en una elección, pierde su registro.