La solución a conflictos limítrofes, motivaron la creación de dos nuevos núcleos ejidales en Jacala y Xochicoatlán, según dio a conocer el titular de la Procuraduría Agraria en la entidad, Andrés Velázquez Vázquez, al mostrar una radiografía en la entidad.
Con una extensión superior a las dos mil hectáreas, ambas ya tienen la resolución presidencial.
En Jacala, la comunidad de Agua Fría Chico resolvió la disputa de 200 hectáreas que causó muertes en ésta y localidades aledañas.
Aquí, la Procuraduría Agraria en Hidalgo dotará a más de 150 personas con mil 300 hectáreas, aproximadamente, después de 60 años en pleito por la disputa de 200 hectáreas a causa de límites territoriales.
Mientras que en Xochicoatlán, existe una dotación pendiente con más de 700 hectáreas para distribuirlas a 150 beneficiarios, “estamos en los trabajos técnicos que hemos estado conciliando con los ejidos que los rodean y pequeños propietarios, en unos días vamos a anunciar la entrega de la documentación que es como el acta de nacimiento de este nuevo núcleo agrario”. Así que Hidalgo sumará dos a la lista actual de ejidos que son mil 157.
Mencionó el funcionario federal el trabajo realizado en ambos casos del Registro Agrario Nacional; Secretaría de Desarrollo Agrario, Territotial y Urbano (Sedatu); esta Procuraduría y la colaboración permanente con el actual gobierno estatal.
Detalló la radiografía sobre la condición agraria en el Estado que fue expuesta a la autoridad estatal y dividió en dos escenarios: los ejidos que requieren una urgente atención por conflictos sociales o en extrema pobreza y aquellos con alto potencial económico.
En el primer caso se ubican San Bartolo Tutotepec, Singuilucan, Tenango de Doria, Agua Blanca, Cardonal, Pisaflores, Jacala, Chapulhuacán y más, “requieren de especial cuidado, tienen una gran población indígena que necesitan apoyo en el desarrollo rural. Hablemos desde producción, comercialización. Urge porque históricamente han sido los más abandonados”.
Y en el segundo punto enlistó unos 200 núcleos agrarios bajo esas condiciones, ubicados en Atotonilco de Tula, Zacualtipán, Ixmiquilpan, entre otros.
Apuntó que hoy en día están en sintonía el gobierno estatal y federal a fin de contener tal situación mediante la aplicación de programas gubernamentales, “nuestra petición al gobernador Julio Menchaca es que nos permita interactuar entre funcionarios federales y estatales, conocer la problemática y también buscar soluciones”.
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Reiteró esto al exponer que de no atender los problemas del campo catalogados como urgentes, “se estaría atentando contra la gobernabilidad, la estabilidad social e incluso estaríamos poniendo en riesgo la paz social de nuestro estado”.
Hidalgo es una de las entidades federativas con más paz social, se considera que ocupa el quinto lugar, “pero si descuidamos el sector agrario, corremos el riesgo de un estallido social. En necesario escuchar a los núcleos agrarios y buscarles solución a sus problemas. No podemos caer en la burocracia ni en la apatía e indiferencia”.