Los daños en infraestructura, tras el sismo de magnitud 7.1 del 19 de septiembre de 2017 en la entidad, fueron mínimos, pues las afectaciones no representaron daño estructural, informó Enrique Padilla, encargado de la Dirección de Protección Civil y Gestión de Riesgos. En las revisiones se detectaron 57 inmuebles afectados, pero ninguno de ellos con daños en la infraestructura. Estas se realizaron en 21 de los 84 municipios de la entidad.
Fueron en Pachuca, San Agustín Tlaxiaca, Epazoyucan, Tlanalapa, Ixmiquilpan, Almoloya, Emiliano Zapata, Tulancingo, Santiago Tulantepec, Huichapan, Alfajayucán, Apan, Mixquiahuala, Cuautepec, Ajacuba, Singuilucan, Chilcuautla, Tepeapulco, Zacualtipán, Progreso y Nopala de Villagrán.
Las afectaciones, en general, fueron fisuras y cuarteaduras, ninguna de consideración.
En tanto, a nivel general, a partir de 2018, de acuerdo con la última reforma publica en el Diario Oficial de la Federación, todas las empresas y edificios públicos, sin excepción, son revisados, los que tienen giro de alto riesgo y de bajo riesgo.
Informó que las revisiones deben ser periódicas, una vez al año, tanto inmuebles privados como públicos, a fin de evitar tragedias.
Hace dos años, a las revisiones de infraestructura se sumaron varias dependencias, como el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Colegio de Ingenieros Civiles y el Instituto Hidalguense de la Infraestructura Física Educativa (INHIFE), dependiente de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH).