Ante los casos de bullying que se presentan en las escuelas, algunos padres de familia explicaron que han optado por orientar a sus hijos, observarlos, hacerles ver las conductas inadecuadas y hablar con profesores para prevenir el acoso escolar; sin embargo, otros más, reconocieron que han aconsejado defenderse en caso de que los profesores no tomen cartas en el asunto.
Mediante un sondeo realizado en instituciones educativas del primer cuadro de la ciudad, los padres de familia refirieron a este medio de comunicación que las burlas y las agresiones son recurrentes dentro de las aulas, por lo que se han dado a la tarea de tener mayor comunicación con los menores para conocer su estado de ánimo y así detectar este tipo de situaciones.
Alicia González, quien tiene un hijo en la primaria Justo Sierra de la colonia Centro, refirió que ella ha platicado con el menor para hacerle ver lo que está mal, para explicarle qué hacer en caso de que alguien lo agreda: “Creo que en nosotros como padres está también el ayudar a que las cosas no pasen a mayores, los hijos deben tenerte confianza y si uno les pone atención te darás cuenta si los agreden, él sabe que primero le tiene que decir a la maestra y después a mí”, dijo.
No obstante, otros padres de familia han decidido recomendarles que se alejen del niño agresor: “Tiene prohibido gritarles o pegarles a otros niños, le tiene que avisar a la maestra, pero si no le hace caso y le siguen molestando sabe que se tiene que defender y me tiene que decir, a lo mejor es malo que actúe igual que los demás pero también no es justo que los niños se aguanten solo porque eso no se debe de hacer”, explicó Gerardo Jiménez, padre de alumno de la primaria Pedro Anaya en Mariano Abasolo.
En tanto, unos más se han visto en la necesidad de cambiar a sus hijos de turno o de escuelas para evitar confrontaciones, tal es el caso de Elizabeth Pérez, madre de un alumno de la primaria Teodomiro Manzano de la colonia Morelos, quien recientemente expuso a este medio de comunicación la falta de seguimiento por parte de autoridades de la SEPH al caso de acoso escolar de su hijo; explicó que por desgracia, la situación no solo afectó emocionalmente a su hijo, sino que además el cambio de turno le generó diversos gastos como 400 pesos extras de cuota y aproximadamente mil 400 pesos del uniforme.