En promedio cada pachuqueño produce 1,4 kilógramos de desechos sólidos cada día, lo que supera las 0,9 kilógramos que genera cada persona en el resto del estado, informó el titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales estatal (Semarnath), Benjamín Rico Moreno.

El funcionario estatal explicó que en Pachuca y su zona metropolitana por el uso de diferentes productos para distintos fines cada ciudadano genera más basura que en el resto de la entidad, los cuales en su mayoría son residuos plásticos.

De acuerdo con el responsable de la Semarnath, se debe impulsar una economía circular en la que se pueda disminuir, reusar y reciclar cada producto desechable, lo cual ayudará al reciclaje de los residuos sólidos, pues en la actualidad se producen, usar y tiran los desechos que no vuelven a ser reutilizados.

Agregó que en unos días será clausurado el relleno sanitario del Huixmí en Pachuca, el cual ha cumplido su periodo de funcionalidad y no se puede extender otra celda más, por lo que se debe apostar por el nuevo espacio de valoración de los residuos sólidos de la zona metropolitana de Pachuca.

Comentó que están analizando la mejor opción para el destino de los residuos sólidos y por ello mantienen coordinación con los ayuntamientos de Pachuca y Mineral de la Reforma, los cuales están interesados en que se resuelva el problema del destino de la basura de la mancha urbana.

Asimismo, Rico Moreno sostuvo que debe implementarse un cambio de costumbres sobre el uso de los residuos sólidos en la capital del estado, ya que es un área que está por encima de la media nacional en cuanto a la generación de basura con respecto al resto de la entidad.

En el relleno del Huixmí se generan cerca de un millón de toneladas de gas metano y un millón 800 mil toneladas de residuos sólidos, por lo que afirmó que en breve se cerrará para apostar por un modelo que reutilice los desechos que se generan en la capital del estado.

Añadió que el gobierno estatal asume el cierre del Huixmí como una acción de responsabilidad social en la que se evita seguir con un espacio que produce niveles elevados de contaminación tanto en la tierra como en el aire.