Se estima que solo entre el 15 y 20 por ciento de autos y motocicletas accidentados son recuperados de los corralones.

En algunos lugares llegan a tener autos desde hace 20 ó 25 años y los deben de mantener hasta que sean liberados por la autoridad competente, comentó Julio Jarillo quien está al frente de uno de estos lugares.

En Tulancingo hay alrededor de diez corralones y trabajan por medio de concesiones, agregó.

El entrevistado comentó que, si se trata de autos modelo 80 u 85 por lo regular ya no los sacan del corralón, inclusive recientes, así como que en cuanto a las aseguradoras si se dan cuenta que el daño rebasa el 50 por ciento de lo que vale el vehículo, más el siniestro, lo dejan perder.

En casos en los que los lugares donde se depositan estos vehículos están saturados, lo que depende del tamaño del lugar, se ven en la necesidad de ocupar otro terreno para poder depositar más.

En algunos casos la autoridad les manda oficio y les refiere qué pueden hacer con ellos y el resto los deben de mantener ahí.

Agregó que tiene entendido que últimamente la Policía Federal envía un oficio en el que refiere al usuario que si no libera el vehículo se pierde, y al parecer otorgan 45 días para que lo hagan, de lo contrario la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) puede disponer de las unidades o les refieren que hacer.

Explicó que los tramos carreteros están concesionados y los convenios se realizan por lo regular en el tiempo que duran las administraciones y los corralones ganan por arrastre de unidad.

Consideró que hay algunos corralones que están a su máxima capacidad y deberán esperar hasta que salga una orden en la que alguna instancia remate las unidades en el caso de aquellas involucradas en algún presunto delito.

Exteriorizó que las concesiones estatales son con el Instituto del Transporte y las federales con la SCT, en cuanto a convenios de trabajo con presidencias municipales duran lo mismo que la administración, concluyó

DATO

Sólo entre el 15 y 20 por ciento de vehículos chocados son recuperados de corralones.