“No solo habrá retrasos en el pago de becas federales, al carecer de suficientes cajeros bancarios diferentes regiones de esta entidad, también tendremos malestar ciudadano porque a muchos se les reducirán cantidades de sus becas de Prospera, al eliminársele componentes como educación, salud y alimentación”.
Así lo adelantó Abraham Mendoza Zenteno, coordinador de Programas para el Desarrollo del gobierno federal, al referirse a las molestias que habrá entre los beneficiarios de esos apoyos, afirmando que se darán de baja a los que incumplan con requisitos o “no sean de carne y hueso”.
Señaló que largas filas de personas en municipios de la Huasteca Hidalguense se debieron a que en Hidalgo hay más decien mil beneficiarios de Prospera y otros apoyos de adultos mayores, los cuales traían un atraso de dos bimestres, y fueron insuficientes los servicios bancarios.
Reveló que muchos beneficiarios recibirán pagos de aproximadamente 100, 200 o 300 pesos, ya que sus hijos dejaron de estudiar y solo les queda el componente alimentación.
Mendoza Zenteno indicó que el gobierno federal, el año pasado y en el transcurso de estos meses, validó los padrones de los programas de asistencia, y encontró beneficiarios que no son “de carne y hueso”, por ello, obviamente, no están saliendo esos pagos.
Señaló que en cada cabecera municipal instalaron mesas de atención a las que pueden acudir con los servidores de la nación para aclarar dudas y reorganizar el censo.
“Tenemos el problema de que al visitarlos a su domicilio, ya no coincidían porque se cambiaron, o simplemente no fueron encontrados porque ahí no viven, entonces no se validó la existencia de esas personas. Y son varios los programas federales que traen ese error”, manifestó.